Un 97 por ciento de los alumnos que realizan la selectividad aprueban pero no todos pueden entrar en el grado que quieren en primera opción. Todo es cuestión de oferta y demanda y en el caso de la universidad esto se regula a través de la excelencia académica de las PAU y del bachillerato. El año pasado el doble grado en Matemáticas y Física en la UAB salió con una nota de corte de 13,23 sobre 14 y le siguió Medicina con un 12,7 en la UB. Las PAU cuentan un cuarenta por ciento y el bachillerato un sesenta por ciento. Una ponderación que se cuestiona. El presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), Segundo Píriz, comentó hace escasos días que se debería dar "más valor" a la nota del examen de selectividad y menos a las notas del bachillerato. Píriz, en la comisión de Educación del Congreso, donde se trabaja para buscar un Pacto de Estado Social y Político por la Educación, constestó así -"aunque esto pueda ser una revolución"- cuando le preguntaron algunos diputados cómo debería ser la prueba de acceso a la universidad. El presidente de los rectores reconoció que "no es un experto" pero que su respuesta sería que la prueba de acceso a la universidad "fuera justa".