La Guardia Civil tiene previsto trasladar esta tarde a la Audiencia Nacional al expresidente del Fútbol Club Barcelona Sandro Rosell y tres supuestos testaferros suyos detenidos, tras tomarles declaración esta mañana en el cuartel de Travessera de Gràcia.
Según han informado fuentes cercanas al caso, los agentes que dirigen la investigación -una operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional- están tomando declaración a los cuatro detenidos en las dependencias policiales, asistidos por sus abogados.
Rosell y sus tres supuestos testaferros detenidos ayer han pasado la noche en los calabozos del cuartel de la Guardia Civil en Travessera de Gràcia, mientras que la esposa del expresidente del FC Barcelona, también detenida, quedó en libertad a la espera de declarar ante el juez, tras asistir a los registros en los domicilios del matrimonio practicados ayer.
A lo largo de esta mañana, los agentes encargados de la investigación, que dirige la titular del juzgado de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, están confeccionando los atestados policiales que harán llegar a la magistrada antes de que tome declaración a los detenidos.
Por ese motivo, a lo largo de esta mañana están siendo interrogados, con la asistencia de un abogado, Rosell y sus tres presuntos testaferros, quienes podrían acogerse a su derecho a no declarar hasta saber con concreción los hechos que se les imputan, en un caso que está bajo secreto de sumario.
Por su parte, la terrassense M. P., esposa de Rosell, quedó ayer en libertad a la espera de ser citada por la juez instructora, tras asistir al registro domiciliario de la segunda residencia del matrimonio en Corçà (Girona), y esta mañana ha acudido al cuartel de la Guardia Civil con una maleta con enseres para su marido.
Mientras tanto, los investigadores están analizando la documentación intervenida en el domicilio de Rosell, su lujosa segunda residencia en Corçà y la sede de sus empresas en Barcelona, en busca de documentación que pueda estar relacionada con el presunto blanqueo de capitales que se le imputa.
En la investigación, que deriva de una querella de la Fiscalía, se sospecha que Rosell, junto al expresidente de la federación brasileña de fútbol Ricardo Teixeira, lideraba presuntamente un entramado para blanquear 15 millones de euros obtenidos mediante comisiones ilícitas en la venta de derechos audiovisuales de la selección del Brasil.