Unas 60 personas asistieron este sábado al mediodía al pícnic de época que se celebró en el Parc de Vallparadís, en la zona del Castell Cartoixa. Se trataba de una de las principales novedades de la XV edición de la Fira Modernista. Ataviados con ropa como la que vestían los ciudadanos de finales del siglo XIX y principios del XX, tanto egarenses como gente venida de Canet de Mar, Cartagena e incluso Oporto disfrutaron de una comida al aire libre, inspirada en el pícnic Belle-Èpoque que se organiza cada año en el zoo de la ciudad belga de Amberes, uno de los mejores de Europa.
La organización pedía a los asistentes que se vistieran de época y la gran mayoría escogió vestir como la burguesía de hace más de cien años aunque también se pudo ver a algunas mujeres vestidas de criadas. Varios grupos, con sus cestas de mimbre, se sentaron en el césped del parque, bajo los árboles, para disfrutar de la comida.
"Nos parece estupendo que este año se organice aquí en Terrassa un picnic modernista. Nosotros, en Cartagena, ya hemos hecho dos como este. Hemos venido hoy aquí a apoyar este pícnic y lo que queremos es que el próximo año los de Terrassa vengan a Cartagena a apoyarnos también", explicaba Juan Manuel, de la asociación cultural Los Modernistas de Cartagena de Levante.
"Esto es muy bonito. Todo lo que sea recuperar tradiciones y cosas de antes está muy bien porque mucha gente no lo conoce. Es una forma de poner en valor toda esta cultura que había antes y que por desgracia se va perdiendo", aseguraba el murciano, que era la segunda vez que acudía a la Fira Modernista de Terrassa.
Un poco más cerca del castillo se había instalado un grupo venido de Canet de Mar. "Venimos siempre a la Fira Modernista de Terrassa. Es muy bonita", comentaban Salvador y Pipi. "Está muy bien que este año hayan incorporado un picnic modernista pero estaría mejor si la organización pusiera alguna sillas y mesas", señalaba la pareja, que llevaba unos vestidos de época hechos por la mujer, que es modista.
Aunque las gran mayoría de personas que se congregaron el sábado en el Parc de Vallparadís procedían de Cartagena y Canet de Mar, también había algunos egarenses. "Somos asiduos de la Fira Modernista. Colaboramos desde el principio con el desfile de vehículos históricos. Es fantástico que este año haya un pícnic modernista. Es innovación, es paisaje, es vestuario, es juventud… Es muy bonito", destacaba Carme Puig. La terrassense había acudido al picnic con su familia y aseguraba que todos juntos irían también a ver distintos espectáculos de la feria.
"Hay cosas que las hemos hecho, otras las hemos comprado. Hace años que participamos de la feria y vamos cambiando de vestido. Siempre hacemos cosas nuevas para no ir siempre igual", contó Puig con respecto a la ropa que llevaban puesta.
Desfile de moda modernista
Los asistentes a este pícnic modernista, organizado por la entidad Llum i Color del 900, pudieron disfrutar de un desfile de vestidos de época, en el que se pudieron ver enaguas, pamelas, tocados y paraguas de época. La gran mayoría de las mujeres que desfilaron habían confeccionado los vestidos con sus propia manos, algunas de ellas inspirándose en los vestidos del fondo de ropa del Centre de Documentació i Museu Tèxtil (CDMT). El desfile estuvo acompañado de los comentarios de un miembro de la organización, que desveló algunos de los códigos secretos de la ropa de aquella época.
Los que este sábado al mediodía se acercaron al Parc de Vallparadís pudieron disfrutar también de una exhibición de sable militar y florete clásico, a cargo de CEO Sala Duo Bellum. La actividad finalizó con una actuación musical a cargo del grupo Se’n Fa Una, que sirvió para recrear lo que era el baile popular de la época. Además, el ferrocarril de Vallparadís circuló ampliando horarios, hasta las cinco de la tarde.
"Está muy bien que el pícnic se complemente con un desfile, una exhibición de esgrima y una actuación musical, le da mucha vida. Si el próximo año lo vuelven a organizar, volveremos", aseguraron Pipi y Salvador, de Canet de Mar.