El pleno municipal debatirá hoy la nueva ponencia de valores del catastro, cuando se cumplen 21 años de la última revisión catastral en la ciudad. El equipo de gobierno (PSC y PDeCAT) lleva esta tarde a votación la ponencia de actualización de valores y espera lograr los apoyos suficientes para sacar adelante su propuesta fiscal.
Cuando entre en vigor, la revisión catastral supondrá un incremento medio del 18,37% en el valor de los inmuebles de Terrassa y de un 24,47% para los de uso residencial. Los aumentos más importantes se registrarán en el centro de la ciudad y en la primera corona, en las zonas que han visto mejorada su situación urbanística desde 1996, como los entornos del Parc de Vallparadís, y en los polígonos de viviendas, que han quedado liberados del valor administrativo que tenían años atrás.
El pleno votará hoy los nuevos valores y la propuesta de repercusión en el IBI que formula el equipo de gobierno. El incremento de valores fruto de la nueva revisión se aplicará en el IBI de forma gradual durante los próximos 10 años, a razón de un 10% cada ejercicio.
El ejecutivo de Jordi Ballart ha anunciado su intención de congelar el tipo de gravamen en el 0,69% para los inmuebles del tipo general y aumentarlo del 0,93% actual al 1,033 para los denominados inmuebles VIP -comercio, oficinas, almacenes, hostelería, instalaciones deportivas, ocio, etc.-, que suponen el 10% de los valores catastrales más altos. Para aliviar el impacto económico de la revisión, el gobierno propone fijar un tope de incremento máximo del IBI del 5% para los inmuebles del tipo general (uso residencial) y de un 10% para los inmuebles VIP.
La CUP pide lógica redistributiva
Ayer, la CUP hizo pública su propuesta de cara a la revisión catastral, en la que sugiere aplicar una lógica redistributiva y no bonificaciones indiscriminadas.
Los "cupaires" coinciden con el gobierno municipal en la oportunidad de congelar el gravamen actual del 0,69% para el tipo general y piden que el tope de incremento del IBI del 5% se aplique únicamente al 10% de los valores catastrales más bajos "y no a todos los propietarios de forma indiscriminada, com propone el gobierno".
Por lo que respecta a los inmuebles VIP, sugieren aumentar el tipo de gravamen al máximo previsto por ley, situándolo en el 1,23%, y no en el 1,033% que plantea el ejecutivo. Para la concejal y portavoz de la CUP, Maria Sirvent, "en el caso de los VIPS, el propio hecho imponible -ser propietario de un inmueble que está entre el 10% de los mejor valorados de la ciudad- presupone ‘per se’ capacidad económica para hacer frente a la cuota íntegra".
La formación anticapitalista explica que la medida llevaría al Ayuntamiento de Terrassa a aumentar sus ingresos en concepto de IBI por encima del ejercicio anterior y que ese diferencial "permitiría un margen para realizar políticas sociales y redistributivas".