Cuando la década de 1960 comenzaba, Conxita Armengol i Mitjans era una joven de veintipocos años, que cursaba estudios de asistente social, y hacía prácticas en el barrio de les Arenes de nuestra ciudad. Para sacarse el título en la Escuela de Formación Social Sabadell-Terrassa debía realizar una tesina de fin de carrera, y decidió aprovechar la experiencia y los conocimientos que iba acumulando de tales prácticas. El trabajo se tituló "La asimilación de los inmigrantes en Tarrasa. Estudio del barrio de las Arenas", y fue terminado y presentado en 1964. Desde entonces, había dormido en un cajón.Hasta el pasado año, en que Josep Maria Font, sempiterno buscador y editor de obras que enriquezcan la bibliografía terrassense, y la historia y el conocimiento de la ciudad, supo de él, lo pidió, lo leyó, y consideró interesante publicarlo. Y 53 años después de su elaboración, "La asimilación de los inmigrantes en Tarrasa. Estudio del barrio de las Arenes" se ha convertido en un libro editado por la Fundació Torre del Palau.
"Lo que viví en aquellos años"
"La tesina viene a ser un resumen de todo lo que viví en aquellos años, entre 1960 y 1962 aproximadamente,y la hice con mucha ilusión", recuerda Conxita Armengol a este diario. Fue un tiempo en el que "conocí a muchas personas de les Arenes, y también hice muchas encuestas y entrevistas a la gente del barrio. Tengo un recuerdo muy agradable, por ejemplo, del presidente de la asociación de vecinos, ‘Don Pepe’, a quién todo el mundo tenía confianza, y que me dió mucha información sobre el barrio". "Cuando lo acabé, coincidió con las riadas", por lo que le añadió el capítulo "Las inundaciones-daños ocasionados", que no obstante en les Arenes no fueron tan grandes como en otras zonas de la ciudad.
La Fundació Torre del Palau ha querido publicar esta tesina porque constituye un inédito retrato de la vida en Terrassa, y especialmente en les Arenes, en aquella época, y los datos y situaciones que describe resultan un testimonio valioso y singular de aquel período de la historia de la ciudad. Lo ha hecho además en una edición facsímil que reproduce el trabajo tal y como Conxita Armengol lo presentó, esto es, mecanografiado, por lo tanto sin composición, y con los caprichos de tinta que imponían las máquinas de escribir de hace medio siglo, los gráficos hechos a mano y, atención, fotografías de les Arenes de baja definición pero inéditas. Y escrito en castellano "como era preceptivo". Más sabor de época, imposible.
Los dos primeros capítulos abordan de manera general la "problemática de los movimientos migratorios", y las características de éstos en España y Catalunya. El interés comienza en el tercero, dedicado a Terrassa, con un análisis de la procedencia de los inmigrantes.
"Dormían en cualquier rincón"
El cuarto capítulo es una completa radiografía del barrio de les Arenes, con todos sus datos y características, en el que podemos leer unas sorprendentes denuncias tanto de la explotación laboral como de la especulación inmobiliaria. "Fue tanta la gente que vino, que era materialmente imposible darles vivienda. Había muchos hombres que aún tenían la familia en el pueblo, que vivían prácticamente en las fábricar. Dormían en cualquier rincón y comían sin salir de la fábrica. De todas formas, si los industriales de aquellos años, que hicieron verdaderas fortunas, hubieran dedicado una parte de ella a la construcción de viviendas, el problema no hubiera sido tan enorme."
Unas páginas más adelante, en relación a un proyecto de urbanización, señala que "los terrenos que comprende dicho polígono, y que en una gran mayoría pertenecen a un solo terrassense, por el hecho concretísimo de haber aplicado el Estado muchos millones en el encauzamiento de la riera de les Arenes, han aumentado escandalosamente de valor. (…) Y la cosa se agrava, cuando este beneficio fabuloso lo sacan (si Dios no lo remedia) de la gente económicamente débil: el inmigrante, el andaluz en su mayoría", los inmigrantes "que venden la casa del pueblo para pagar la entrada de su ‘solar’". Cosas que no podían publicarse en la prensa de la época. Aún ceñida a la forma de una tesina, en la prosa de Conxita Armengol aflora el relato los tejemanejes económicos de entonces, y una inquietud por la injusticia social que veía cada día.
El quinto capítulo, "La asimilación de los habitantes de Las Arenas" ahonda en los aspectos religiosos, culturales, recreativos y profesionales de estos, en su vida cotidiana y su personalidad. "La población de las Arenas en su mayoría es analfabeta. Los padres o cabezas de familia han recibido una instrucción mínima. La mayoría no han sido instruidos en absoluto. Muchos manifiestan saber leer y escribir y en realidad sólo saben firmar."
Tebeos y hogares sin libros
¿Las lecturas de los habitantes de Las Arenas a principios de la década de 1960? "La mayoría no lee nada. Se ven algunos jóvenes leyendo novelas de bolsillo. Los chicos, los tebeos. Según la encuestra practicada, el 35 por ciento de los contestantes afirman leer el periódico, si bien la mayoría de ellos solo leen las noticias de tipo deportivo. La experiencia nos ha demostrado que las revistas como Hola, Por Qué, El Caso, son las más abundantes en el barrio. En la mayoría de los domicilios visitados, más de un cincuenta por ciento no tienen ningún libro en su hogar, ésto parece imposible pero es así".
En las conclusiones , Armengol enumera los factores favorables y contrarios a la integración de los inmigrantes. Entre los primeros, "la excelente disposición de los inmigrados", y "la absoluta carencia de segregación racial y la facilidad de cruces o matrimonios entre autóctonos e inmigrados". Entre los factores contrarios, "la actual política cultural del Estado español, que prohibe la enseñanza en catalán, así como la difusión de la lengua en todos los medios que puede llegar al público"; "la inexistencia total de escuelas que enseñan el idioma catalán y el estado de abandono en que se encuentra en general la enseñanza primaria en España", y "la concentración y localización de los inmigrados en cantidad masiva en barrios o lugares formando bloques de dificil penetrabilidad y de escasa relación con la población autóctona".
La autora finaliza su estudio con unas "sugerencias ante la situación actual de la inmigración": una oficina de recepción de inmigrados, la organización de Caritas , un cuerpo de asistentes sociales, centros de orientación profesional, cooperativas, el fomento de centros sociales. Y Armengol, que unas páginas antes ha escrito que "repugna por anticristiana e inhumana la actitud de aquellos que dicen ‘lo que hace falta en las Arenas son unos cuantos tractores que lo arrasen todo’", acabó con un llamamiento "a la conveniencia colectiva y a cuantos sientan la inquietud social para colaborar en el comienzo de tales actividades".
LOS DATOS
Título: "La asimilación de los inmigrantes en Tarrasa. Estudio del barrio de las Arenas"
Autora: Conxita Armengol
Editorial: Fundació Torre del Palau