La tecnología evoluciona de una forma rapidísima y su uso descubre, de una manera constante, nuevas y variadas perspectivas. También, en el ámbito comercial. En este campo, una de las tendencias es utilizar WhatsApp (una aplicación que ya forma parte del día a día de millones de personas en todo el mundo, desde niños a gente mayor) para hacer que comprar sea más cómodo o, por ejemplo, para reservar una mesa en un restaurante.
“A mí, muchos encargos me llegan por WhatsApp”, comenta Daniel Majoral, propietario de El Tastet de la Cisqueta, una carnicería y charcutería situada en la calle Nou de Sant Pere. “Yo siempre llevo encima el móvil y, además, me resulta muy cómodo que un cliente me haga pedidos por WhatsApp, porque así quedan bien anotados directamente en la pantalla y los puedo consultar en cualquier momento”, añade. Según explica Majoral, las clientas jóvenes son las que más se valen de la aplicación para hacer las citadas comandas.
“Muchas de ellas sólo pueden venir a la tienda una vez a la semana, o cada quince días, porque trabajan y no tienen tiempo de más. De forma que cuando quieren comprar, un día antes me preguntan por WhatsApp si tendré tal o cual producto”, detalla. “Como WhatsApp es instantáneo, yo les contesto de inmediato.”
Ésta es sólo una muestra de cómo esta aplicación se convierte en un recurso positivo para los pequeños comercios, puesto que WhatsApp permite establecer un contacto muy directo y preciso, a parte de dar una respuesta casi al segundo al cliente.
“Aún no todas las tiendas o empresas usan WhatsApp en su relación con el público. Pero si los comercios adoptan esta aplicación, y saben cómo utilizarla, les puede suponer notables beneficios”, indica Montse Peñaroya, experta en sociedad de la información y colaboradora habitual de Cecot y la Cambra de Comerç de Terrassa en el ámbito formativo. “Hoy todo el mundo tiene WhatsApp, incluso las abuelitas de 80 años. Eso, a nivel comercial, hay que aprovecharlo”, añade.
Listas de difusión
Los consumidores que den con un establecimiento que tenga una cuenta de WhatsApp dispondrán de ventajas. Primero, según apunta Peñarroya, “porque la aplicación abre un nuevo campo en el servicio de atención al cliente”. Y más -concreta- desde que WhatsApp puso en funcionamiento una página web (web.whatsapp.com) que permite ver, no ya en el móvil, sino en un ordenador (es decir, en pantalla grande) aquellos mensajes de los clientes que llegan al “smartphone”.
“Cada vez hay más oficinas de turismo y hoteles que atienden a sus clientes a través de dicha web. Desde allí pueden darles una respuesta inmediata con la comodidad que representa, no ya escribirles desde el pequeño teclado de un teléfono móvil, sino desde un ordenador”, dice. “Un número creciente de oficinas de turismo dan información constante de la ciudad a los visitantes vía WhatsApp. También hay hoteles de costa que envían información meteorológica a sus clientes por medio de la aplicación”, afirma. Más allá, como consumidores es posible que aceptemos formar parte de lo que WhatsApp llama “listas de difusión”. La “app” de mensajería ofrece esta posibilidad, que en pantalla aparece justo al lado de la opción que permite crear un chat de grupo con familiares y amigos.
A través de las listas de difusión, una tienda puede informar de ofertas y promociones a varios clientes a la vez, de una sola tacada. Eso sí, los mensajes sólo los recibirán aquellos clientes que tengan el número de teléfono de la tienda incluido en su agenda de contactos.
El establecimiento Lizarran de la Rambla d’Ègara es otro de los que se sirve de WhatsApp para su relación con el público. “Los jóvenes son los más propensos a emplear la aplicación, por ejemplo, para reservar una mesa”, explica el propietario, José María Jolís.
Es cuestión también de estar atentos porque, gracias a la “app”, pueden llegar regalos inesperados. Y es que cada vez hay más empresas que organizan sorteos empleando WhatsApp como cebo. “Hace un tiempo, la marca Toyota te invitaba a cambiar tu estado de WhatsApp, es decir, la frase que escribes como tu presentación y que ve todo el mundo con quien chateas. Toyota te invitaba a escribir allí la palabra “Hibridizado” y a ir entonces a un concesionario de la marca para mostrar que ése era tu estado de WhatsApp. Sólo con eso entrabas en el sorteo de un coche. En el fondo, Toyota logró lo que quería, que era notoriedad y promocionarse”, explica Peñarroya.
“WhatsApp ganará poco a poco terreno a Facebook a nivel comercial. Y más si tenemos en cuenta que hay una generación de jóvenes, que tienen 16 o 17 años, que ya empiezan a ver Facebook como una herramienta obsoleta. Ellos están sobre todo en Instagram y también, claro, en WhatsApp”.
LA CIFRA
1.200 millones. Son los usuarios mensuales de Whatsapp, según Facebook, la compañía propietaria de la “app”.