Mañana domingo la Iglesia conmemorará la entrada de Jesús en Jerusalén y una semana después recordará la Resurrección de Cristo. Habrán transcurrido siete días, la Semana Santa, la celebración de la Pasión y la Redención. Habrá pasado la cita más importante, junto con la Navidad, del calendario católico, que en Terrassa estará repleta de jalones solemnes con una presencia cada vez mayor de los acontecimientos en la calle, en procesiones como la del Encuentro o el Via Crucis.
Domingo de Ramos, 9 de abril, día de la palma y la rama de olivo, remembranza simbólica de la entrada entre aclamaciones de Jesús en Jerusalén. Las parroquias celebrarán la jornada al mediodía en sus templos y en las plazas y el obispo de Terrassa, Josep Àngel saiz Meneses, oficiará la Bendición en la Plaça Vella, para luego presidir la misa en la catedral del Sant Esperit. Por la tarde, a las 5.30, la parroquia de Sant Pere y la asociación de vecinos del Antic Poble de Sant Pere llevarán a cabo en La Seu d’Ègara una muestra cultural de tradiciones religiosas relacionadas con estas fechas. En Les Arenes tendrá lugar a las diez de la mañana, después de misas en la escola Vedruna y en la parroquia de Santa Maria, la popular procesión de la Borriquita.
La siguiente cita de relevancia tendrá lugar el martes, 11 de abril, en la catedral. Será la Misa Crismal, a las once de la mañana, presidida por el prelado egarense. A esta Eucaristía especial han sido convocados los sacerdotes y diáconos de la diócesis.
Con la Misa Crismal se conmemora la institución del sacerdocio en la Última Cena. Los clérigos renuevan las promesas proferidas cuando se ordenaron y el obispo bendice los santos óleos que se utilizarán en las parroquias para dispensar los sacramentos, como el bautismo. En esta misa se felicita a los presbíteros que cumplen veinticinco o cincuenta años de ordenación; o sea, que celebran sus bodas de plata o de oro. Este año son tres curas en el primer apartado y dos en el segundo.
La Procesión del Encuentro, a las nueve de la noche del Jueves Santo en Les Arenes, ha ganado en consolidación en los últimos años (la del 2017 es su séptima edición) y se ha convertido en hito principal de la Semana Santa terrassense.
Participación popular
La organiza la parroquia de la Mare de Déu de Les Arenes y concita una participación popular que crece año tras año. Saiz Meneses también presidirá esta procesión en la que se representa el Encuentro entre Jesús, camino del Calvario, y su madre, la Virgen María. Antes, el obispo habrá lavado los pies a doce miembros de la comunidad cristiana, como hizo Cristo con sus discípulos. Será después de la misa que se celebrará a las siete de la tarde en la catedral. El Jueves Santo se conmemora la institución de la Eucaristía en la Última Cena y, como destaca el Obispado, “se subraya de manera especial el mandamiento nuevo del amor dado por Jesús a sus discípulos”.
Viernes Santo , día de la muerte de Jesucristo en la Cruz, celebración de la Pasión y Muerte. En las parroquias, y también en la catedral del Sant Esperit, se comulgará, aunque no habrá misas propiamente dichas. Se adorará la Cruz y se leerán pasajes de la Pasión. Y se celebrará el Via Crucis, acto central de la Semana Santa por estos pagos. El obispo lo presidirá a las ocho de la tarde en el templo de la Plaça Vella. A renglón seguido saldrán de la Catedral el Sant Crist y el paso de la Pietat, talla del siglo XVII que este año sale totalmente restaurada gracias a los trabajos de Conxa Armengol. Los portantes serán de la cofradía de la Mare de Déu dels Dolors.
La procesión discurrirá por la Plaça Vella, la calle de la Font Vella, la del Cardaire, la de Sant Pere, el Raval de Montserrat, la calle de la Unió y la calle Major, para acabar de nuevo en la Plaça Vella. Habrá un Via Crucis también en la parroquia de Sant Valentí (Segle XX) y en Les Fonts, así como en Ullastrell y Matadepera. A las diez de la mañana del mismo viernes se pronunciará en La Seu d’Ègara el Sermó de les Set Paraules, un acto ecuménico al que están invitados cristianos de iglesias evangélicas.
Recogimiento
La del sábado próximo será una jornada de recogimiento representada en la Vigilia Pascual, celebración que coincide con la luna llena. El Obispado destaca que ese momento, el de la vigilia, constituye “la celebración más importante del año de los cristianos”. La razón: se conmemora la Resurrección de Jesús, el pilar de la fe, la convicción en la victoria. En los templos (también, por supuesto, en el del Sant Esperit) se celebra el triunfo de la fe; a oscuras, con la sola luz del cirio pascual, en una procesión íntima dentro de las iglesias, con lecturas sobre la salvación, con la bendición del agua del bautismo. La misa la oficiará el obispo a las diez de la noche en la catedral, pero habrá celebraciones en todas las parroquias.
La fiesta de la Resurrección tendrá el Domingo de Pascua la representación solemne en las iglesias de la diócesis. La de la catedral la presidirá a las doce del mediodía Saiz Meneses, que impartirá la bendición apostólica a los feligreses.
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LOS DATOS
Museo. El Museu de la Catedral abrirá sus puertas el Jueves Santo y el Viernes Santo, de diez de la mañana a doce del mediodía, y de cinco a siete de la tarde, y el sábado, de diez a doce. Estarán expuestos los pasos de las procesiones
La luna llena. La celebración de la Semana Santa varía de año en año porque el calendario litúrgico cambia en función del calendario lunar. Así, la Vigilia Pascual, el sábado, coincide con la luna llena
Bodas de oro y plata. En la Misa Crismal del martes se felicita a los sacerdotes de la diócesis que cumplen veinticinco o cincuenta años de ordenación. Los que celebran este año sus bodas de plata son tres: Josep Esplugas, Jaume Casas y Joan Josep Recasens. Los que serán felicitados por sus bodas de oro son dos: Lluís Victori y Miquel Carabias