Decía el dramaturgo y director de teatro, Sergi Belbel, a propósito del estreno de "La senyora Florentina i el seu amor Homer" en el Teatre Nacional de Catalunya que se escriben muchos textos -no todos buenos- pero que cuesta por igual que suban a escena. Pep Antón Gómez y Jordi Sánchez son de los pocos autores con suerte y, aunque tarde, han podido estrenar "Avui no sopem", un texto tragicómico que habla de la familia, de las relaciones entre padres e hijos y sobre todo de los primeros cuando ya están jubilados y desean hacer lo que quieren. La obra escrita a cuatro manos, representada el domingo en el Teatre Principal, gustó a tenor de los aplausos que dedicó el público que llenaba la sala.
La comedia sitúa a un matrimonio formado por Vicenç (Jordi Banacolocha) y Maria Teresa (Maife Gil) que, llegados a la jubilación, quieren huir del mundanal ruido y disfrutar de su tiempo libre, de su masía del pueblo y del huerto.
El objetivo parece sencillo sino fuera porque sus hijos lo impiden a su manera. Raquel ( Mercè Martínez), funcionaria y de 40 años vive cómodamente en casa, y Enric (David Bagés), divorciado, con dos niños, recurre a menudo a sus padres para que hagan de canguro. El clan familiar se completa con la novia del hijo, Sílvia (Susanna Garachana), una chica soltera que intenta por todos los medios entrar con buen pie en la familia para agradar a todos pero, lamentablemente, no será así.
El matrimonio quiere exponer la decisión a los hijos pero estos tienen otros planes. La hija está contentísima con que sus padres se vayan al pueblo en fin de semana y el hijo piensa que lo mejor sería vender la segunda residencia de sus padres y que estos repartieran el dinero en vida.
Ambiciones
La situación da juego dialéctico y cada uno de los personajes descubre su ambición y egoísmo. La trama sedujo en seguida porque tanto la historia que prsenta como sus protagonistas son fácilmente reconocibles. La mejor baza de la obra está en los actores y actrices que la defienden. Y cabe decir aquí que todo el elenco, capitaneado por Jordi Banacolocha, está perfecto en el rol que interpreta. Y eso que algunos de los actores, como Banacolocha o Bagés, no lo tienen fácil porque sus personajes atraviesan momentos para la risa fácil y, sin embargo, hallan el equilibrio necesario para evitarla. El retrato, a pesar de ser convencional, tiene su mejor atractivo en los diálogos, cambios de registro, y muy especialmente en la interpretación.
Jordi Banacolocha se impone en autoridad y expresividad a medida que avanza el relato y también lo hace David Bagés revelándose mucho más frágil e inseguro de lo que aparenta. Maife Gil responde bien a su papel de esposa y madre abnegada mientras que Mercè Martínez (actriz que nos pareció desaprovechada) cumple con esa hija "pasota" de viéndolas venir. Susana Garachana, en el papel de la novia siempre comparada, también se muestra convincente en ese papel de quedar bien.
"Avui no sopem" es una comedia entretenida que nos recordó, seguramente porque Sánchez toma parte en su autoría, que respiraba de vez en cuando aquellas dosis de ingenio de la exitosa serie "Plats bruts". Buen hallazgo la escenografía de fondo, que reproduce la fachada de un bloque de pisos para sacar a la luz el microcosmos familiar.
"AVUI NO SOPEM"
Obra de Pep Anton Gómez y Jordi Sánchez. Dirección: Pep Anton Gómez. Intépretes: David Bagés, Jordi Banacolocha, Susanna Garachana, Maife Gil y Mercè Martínez. Día 12 de marzo. Teatre Principal.