La perfumería Júlia de la calle Major ha sufrido una docena de robos con fuerza en cuestión de quince años. Dos de los últimos asaltos, ambos cometidos con el método del "alunizaje", los consideran esclarecidos los Mossos d’Esquadra con las detenciones de dos sospechosos. Están acusados de una veintena de robos, doce en comercios, tres de ellos perpetrados en Terrassa: dos son asaltos en la dicha perfumería y el tercero, la sustracción de un coche en Segle XX.
El establecimiento estragado por los asaltos está radicado en la esquina de la calle Major con la de la Unió. El 28 de septiembre pasado, a eso de las dos de la madrugada, un grupo de delincuentes estrelló un vehículo contra la luna del comercio orientada a la calle de la Unió. Destrozó el escaparate y atravesó al boquete abierto para saquear la tienda, haciéndose con artículos de alta gama y con el cajón de la caja registradora.
Metieron el botín en el mismo automóvil y huyeron antes de la llegada de los Mossos d’Esquadra. Algo similar había ocurrido en el mismo local varias veces. En octubre del 2002, en octubre del 2010 y en abril del 2013, por ejemplo.
El pasado 29 de enero, unos ladrones robaron un coche estacionado en la calle de Guillem de Muntanyans (Segle XX). Horas más tarde, el 30 de enero, de madrugada, los mismos tipos allanaron de nuevo la conocida perfumería de la calle Major. El procedimiento, el conocido: empotraron un turismo, al parecer un Seat León, contra el vidrio, en esta ocasión contra el que da a la calle Major. El conductor colocó el coche de forma que pasase justo por el espacio que mediaba entra una farola y un árbol. Tan justo pasó que arrancó parte de la corteza. Y destrozó el arco de seguridad de la tienda. Tres delincuentes encapuchados, uno de ellos bastente corpulento, irrumpieron en el establecimiento mientras el cuarto esperaba en el coche, en el que escaparon una vez desvalijado el comercio. Nada nuevo.
Repunte
Agentes del Àrea d’Investigació Criminal de la Regió Metropolitana Nord investigaban un repunte de este tipo de asaltos detectado en agosto. Una banda de ladrones estaba detrás de robos por "alunizaje" perpetrados en comercios, sobre todo de telefonía y de perfumes, radicados en el Vallès Occidental y el Vallès Oriental. Los investigadores sabían que los asaltantes actuaban en grupos de, cuando menos, tres personas y violentaban los escaparates de los locales con un turismo que habían robado días antes. La secuencia de hechos era siempre la misma: estrellar el coche, abrir boquete en las lunas, entrar, robar en pocos minutos gran cantidad de artículos y salir pitando con el mismo vehículo, que abandonaban días después.
Los mossos encargados de las pesquisas revisaron historiales de delincuentes conocidos por su inclinación a robos con fuerza similares y cotejaron los datos con las grabaciones de seguridad a las que tuvieron acceso.
Poco a poco, las indagaciones condujeron a los policías a un grupo de sospechosos que vivían en Badalona. Y el 27 de febrero se dispuso un operativo para detener a algunos de ellos. Ese día, los mossos arrestaron a dos presuntos ladrones en Badalona. Son dos hombres de nacionalidad española, uno de 24 años y otro de 43, ambos con antecedentes por delitos contra el patrimonio. Al día siguiente, el 28 de febrero, se realizaron los registros en los domicilios de los imputado, donde los policías decomisaron "gran cantidad" de productos de perfumería procedentes de los robos.
Ya en libertad
Los mossos consideran a los detenidos autores de ocho robos de coches (uno de ellos, el cometido en la calle de Guillem de Muntanyans) y de doce asaltos a comercios, seis de ellos en una misma cadena de perfumerías que se vio impelida a reforzar sus medidas de seguridad. Dos de los robos fueron cometidos en Terrassa: en la Júlia del Centre, uno el 28 de septiembre y otro el 30 de enero. Otros dos, en sendos comercios de Sant Cugat del Vallès, un Milar y un Orange.
La investigación no ha acabado. Posiblemente habrá más detenciones. El juez dejó en libertad con cargos a los dos arrestados.
