PALS
Compañía Cíclicus. Con Miguel Ángel Fernández, Asvin lópez, Itziar Castro, Tanja Haupt, Irene Estradé, Miguel García, Joel Martí Melero. Dirección: Leandro Mendoza. Domingo, 5 de marzo. Centre Cultural.
Puede que algunos se reconozcan en la siguiente escena: buscando donde enterrar unas cenizas, o donde espacirlas, sin verdaderas ganas de separarte del que una vez fue el cuerpo del ser amado. Eso es lo que parece ocurrirle a la troupe de artistas que, en "Pals", protagonizan un bagaje por escenas, por paisajes, por la construcción y la desconstrucción en clave coreográfica de elementos que parten de la geometría para evocar la poesía y los sentimientos.
"Pals" es, sin duda, otro de los aciertos de la programación de circo del Cultural, una pieza conmovedora en la que la pericia de los acróbatas es lo de menos; los ejercicios aéreos, los equilibrismos, están más al servicio de mostrar la fragilidad del ser humano que de asombrar con su heroicidad, en un contexto en el que todo acompaña…
"Pals" es una obra coral en la que nada se deja al azar… ni la luz, que pasa de una cierta luminosidad a la penumbra, imitando de algún modo las diferentes horas del día; ni la música, una hermosísima música original apuntalada por las interpretaciones en directo de una vocalista de bella voz, Itziar Castro, y de la genial multiinstrumentista Tanja Haupt; ni el movimiento escénico, ni una dramaturgia teatralizada muy basada en la interacción y en los gestos, ni un vestuario que al mismo tiempo evoca el carácter natural y rural de una pieza que esconde referencias por doquier. Podemos ver a los personajes y los carromatos de los cuadros de Bruegel, o el surrealismo de Lynch, o también los ecos de un circo antiguo que nada tiene que ver con el circo más "mainstream" de hoy en día. Podemos recordar incluso a aquella troupe a la que Nick Cave retrata en "The Carny" (una canción en la que circo, muerte y dolor también se dan cita.) A ello hay que sumar algunas referencias del continente del que procede el creador de la pieza, el argentino Leandro Mendoza, con una "zamba triste" o un verso de la nana "Duerme negrito."
Celebración
En ese contexto de cierta desolación mezclada con la celebración de la vida, con una cierta comicidad y la constatación de que la vida sigue ("tan solo muriendo yo te he de olvidar") se erigen como elementos de enorme importancia los gigantes palos que servirán para formar parte del carromato, para elaborar las grandes estructuras donde los artistas desarrollan sus ejercicios, hasta desembocar en un gran y sólido carrusel final, todo ello yendo más allá del simple decorado, casi como en una coreografía de objetos que se integran como un personaje más.
"Pals" bebe de todo ello para desarrollarse entre la poética y la narrativa, explicando una historia que nos puede resultar familiar y que nos llega, elaborando un circo trascendente y, sin duda, intelectual.
