Cada quince días se hacía cargo de su hija, a la sazón de sólo 6 años. Está acusado de hacerle tocamientos cuando la bañaba o cuando veían juntos la tele. El fiscal pide una pena de seis años de prisión para el acusado y que pague a la niña 10.000 euros.
Los episodios de supuestos abusos sexuales ocurrieron en el 2014 y la Audiencia Provincial tiene previsto juzgarlos hoy jueves. Cuenta el Ministerio Fiscal que el procesado aprovechaba para los actos sexuales "las visitas que tenía cada quince días con su hija menor de 6 años de edad". Lo hacía, según la acusación, cuando ambos se encontraban en el domicilio familiar, en el sector de Plaça Catalunya-Escola Industrial. Los cometió, añade la Fiscalía, "en varias ocasiones". Le tocaba la zona vaginal "con intención libidinosa" cuando bañaba a la cría "o cuando veían juntos la televisión".
La denuncia la puso la Generalitat a través de la Direcció General d’Atenció a la Infancia i l’Adolescència (DGAIA) el 24 de octubre del 2014. Hacía ocho meses que ese departamento de la Generalitat tenía asumida la tutela de la niña.
Orden de alejamiento
El juzgado de instrucción número 3 de Terrassa tramitó el procedimiento penal y hace un año el Ministerio Fiscal formuló la acusación: consideraba al padre autor de un delito de abuso sexual. En sus conclusiones provisionales, pide una pena de prisión de seis años y una orden de alejamiento: reclama que el acusado no se acerque a su hija durante nueve años, y que, una vez cumplida la pena de cárcel, se vea sometido a un periodo de otros nueve de libertad vigilada.
También solicita al tribunal, de la sección segunda de la Audiencia, que el progenitor se vea privado de la patria potestad por un tiempo de cuatro años. El Ministerio Público, que ha fijado la indemnización a pagar por el procesado a su hija en 10.000 euros, ha propuesto que la pequeña no declare en el juicio. Pide que, si el tribunal cree imprescindible su testimonio, se visione en la sala la declaración recogida durante la instrucción del caso. Y si tiene que declarar en el juicio, solicita que lo haga en una dependencia anexa a la sala de vistas, "a fin de impedir la confrontación visual de la menor con el acusado".