Terrassa

Literatura e improvisación de la mano del escritor Lluís Bosch

Puede que no haya ejercicio artístico más solitario que la escritura, si acaso la pintura; no son frecuentes las oportunidades para presenciar la creación o recreación de un texto en el mismo momento en el que se produce, como sí ocurre en el teatro o en la música.

Y así como las improvisaciones llegaron hace ya años a la música (de forma especialmente manifiesta a través de las "jam sessions"), a la pintura (con las performances) y más recientemente al teatro (con diferentes formas, como los "improshows"), la escritura también ha salido a escena.

Los "Slam de Escritura" son uno de los ejemplos de estas experiencias aún no demasiado extendidas. A Terrassa han llegado las "slam poetry" (recitales poéticos improvisados) de la mano del Perifèric Poetry organizado por Amics de les Arts, pero lo que hoy se celebra en Barcelona es distinto.

El escritor egarense Lluís Bosch es uno de los seis escogidos para participar en una nueva edición de un "slam de escritura" que sus organizadores presentan como "una ‘batalla’ entre creativos de las letras, en la que cada concursante, a lo largo de sucesivas rondas, debe superar retos de escritura creativa siempre imprevisibles delante del público." El funcionamiento es simple: "Los textos se proyectan sobre una pantalla a medida que los concursantes los crean. De esta manera, autores y lectores comparten un momento único e irrepetible de creación y lectura."

La propuesta de hoy se presenta como una "slam de cine" en homenaje a la escritura cinematográfica, y está programada en los Cinemes Girona (Girona, 175, de Barcelona) en una sala con capacidad para 290 personas y "una pantalla enorme."

El jurado estará integrado por Álex Murrull (director de la escuela de cine Plató de Cinema y del Saló del Cinema i les Sèries de Televisió), Jaume Balagueró (director de cine, coautor de la saga "REC", "Los Sin nombre", "Darkness" o "Frágiles") y Cristina Campos (escritora, guionista y directora de cásting profesional). Otros elementos de la velada serán la presencia de un presentador, músicos y actores que añadirán nuevas dosis de humor al encuentro.

Actuar ante público
Lluís Bosch se suma a la experiencia no solo por "la posibilidad de salir a la calle y ‘actuar’ delante del público", sino también por la "tentación de vivir por un instante lo que viven los músicos habitualmente." Confiesa además que "hay que estar dispuesto a aceptar retos y prestarse a desmitificar esta ocupación", la de escritor.

Uno de los desafíos de una competición de estas características es la improvisación, aunque quizá no lo sea tanto para un narrador con años de experiencia y con variada obra publicada, e incluso premiada: "Yo diría que el escritor siempre improvisa, o por lo menos ese es mi caso. Creo que el arte siempre es una improvisación más o menos modulada por los límites de los géneros y las convenciones, pero en cualquier caso, no es una ciencia."

Lluís Bosch no es un escritor que acostumbre a utilizar guiones previos, lo que de algún modo le confiere buenas cualidades para la improvisación: "Aunque me siento a escribir cada día, cada vez parto casi de cero. Escribo a partir de una imagen, de una emoción o de una palabra que me sugiera algo y a partir de ahí voy tirando del hilo. Eso permite crear atmósferas creíbles." A su juicio, "para que un texto diga algo verdadero hay que dejarse fluir. Incluso con la novela, que es un género muy encorsetado por las exigencias narrativas, me interesa que no esté encotillada, que se parezca lo más posible a la vida."

Funcionamiento similar
Previamente al slam, Lluís Bosch participó hace apenas unas semanas en una "jam" de escritura que tuvo un funcionamiento muy similar: "Fue mi primera jam de escritura en directo, en la que también participaron personas del público. Es muy bueno comprobar que la literatura interesa, que hay un público entregado que es capaz de pasar dos horas atento a un pantalla en la que solo aparecen textos. También había música y pequeñas piezas de teatro, todo muy bien entretejido."

Ahora se suma a una experiencia de escritura en vivo en la que "se trata de experimentar con uno mismo, con sus posibilidades y sus límites." Será hoy, a partir de las 8.30 de la tarde, y el precio es de 12 euros.

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