Más de 5.000 euros a American Airlines, y más aún a Vueling, y 7.660 a Air France y 16.527 a Singapore Airlines. Esas son algunas de las cifras de deuda que el fiscal incluye en su escrito de acusación contra un empresario de viajes de Terrassa, acusado de apropiarse de dinero de compañías aéreas de diversos países. El Ministerio Público considera al inculpado autor de un delito de apropiación indebida y reclama que sea condenado a una pena de cuatro años de prisión y a una multa de 7.200 euros; y a pagar unos 103.000 euros a veintisiete compañías.
La sección sexta de la Audiencia Provincial de Barcelona tiene previsto celebrar hoy el juicio. El Ministerio Público asegura que el empresario, de 62 años, era el administrador único de una empresa de viajes y había suscrito en 1995 un contrato de agencia de ventas a pasajeros con International Air Transport Association (IATA). En virtud de ese contrato la agencia quedaba autorizada para vender transporte aéreo por cuenta de las compañías miembros de tal asociación. Pero tenía la obligación de ingresar cada mes el dinero en la cuenta bancaria de IATA. Cada día 15 debía abonar el importe de la liquidación correspondiente a los billetes vendidos durante el mes anterior.
El acusado incumplió "las obligaciones contraídas", dice la Fiscalía. Y lo hizo "con intención de obtener un ilícito enriquecimiento". Según la acusación, el procesado no abonó a las compañías integradas en la asociación 79.975,40 euros que había percibido por la venta de billetes en mayo del 2012, ni 36.829,73 euros que obtuvo por ventas realizadas en junio de ese mismo año, "haciendo suyas las referidas cantidades".
Así las cosas, el 18 de junio del 2012 "la agencia del acusado quedó desconectada del sistema informático de reservas y emisión de billetes", agrega el Ministerio Fiscal, que fija el importe que el hombre dejó de ingresar en aquel momento en 116.805,13 euros. Unos 14.000 fueron recuperados en ejecución de un aval que la agencia tenía frente a Iberia.
Son veintisiete las compañías aéreas perjudicadas que reclaman el resto del dinero. Y entre ellas, American Airlines, Vueling, Aerolíneas Argentinas, Alitalia, Air France, British Airways, Qatar Airways, Lufthansa, Air Berlin y Air Europa. El acusado deberá pagar, según se desprende del escrito del fiscal, 103.000 euros a esas sociedades y su agencia de entonces es considerada responsable civil subsidiaria por la Fiscalía. Un responsable de IATA de España y Portugal ha sido citado por el Ministerio Público para declarar como testigo.