El espectáculo de la compañía Animal Religion, Gran Premi BBVA Zirkòlika de Circ 2015 y Premi Ciutat de Barcelona, llegó al Centre Cultural.
El “sifonòfor” es un animal invertebrado que vive en las profundidades del mar, allí donde no llega la luz y todo es silencio. Es donde habitan extraños seres que no han visto jamás la luz del sol, y donde las leyes del movimiento y de los cuerpos se escapan de lo racional, albergando incluso una parte de mística. El “sifonòfor” es un ejemplo: “Es un animal que existe, y en particular que tiene una cabeza, un centro y diferentes partes de su cuerpo, como tentáculos, que trabajan por separado. Cada parte es independiente.”
Quien explica las características de este invertebrado es Quim Girón, fundador de la compañía Animal Religion e ideólogo del espectáculo que recibe el nombre del “Sifonòfor.” La compañía ha realizado esta semana una residencia en el Centre Cultural para terminar de perfilar los detalles de un espectáculo que se estrenó hace dos años en el Auditori de Barcelona, por encargo. Solo aquella función le valió a la compañía el Premi Ciutat de Barcelona de 2015 y el Gran Premi BBVA Zirkòlika de Circ 2015. Este último premio ha desembocado en la pequeña gira que hoy se inicia en el Centre Cultural.
El “sifonòfor” volvió pues a la vida con una “simbiosis” en la que “todos trabajan desde el centro, cada pieza está unida y a la vez trabaja por separado.” Quim Girón apunta que “me gustó esta inspiración”, incluso el título escogido por su sonoridad, por su musicalidad, “como sinfónica”… De ahí surge este montaje en el que circo y música se funden con naturalidad.
“Sifonòfor” es una combinación de artistas “tanto de inspiración clásica como moderna” que comparten escenario con una soprano que canta una aria de Wagner y un piano clásico, entre otras sorpresas. A las lecturas de la partitura se suma la música electrónica experimental y también la acústica, dando cobijo a ejercicios aéreos, al mástil chino, a múltiples acrobacias y equilibrios acrobáticos, al chasquido de los látigos…
Por las profundidades
Once artistas -algunos de ellos pluridisciplinares, músicos y especialistas circenses a partes iguales- se dejan empapar por la figura de este “sifonòfor”, navegando incluso “por la profundidad del océano”, evocando la comunicación y el lenguaje que se produce en las entrañas del mar, “expresando a través de nuestro cuerpo como para poder ir hacia adentro y ver de dónde venimos, hacia la parte más íntima de uno mismo, al ombligo… nos lleva a este misterio; cada uno de nosotros es diferente pero todos venimos de este`’sifonòfor’ cuando trabajamos en colectivo. Estamos inspirados por esta sensación.”.
También elaboran sus ejercicios guiados por el sonido, por la manera de aglutinar circo y música, por buscar los contrastes entre la voz, los tipos de canciones y las músicas…
El inicio del espectáculo se produce con la entrada de un gran piano, y la entrada a las profundidades del mar está muy vinculada a la música, a las luces, a los sonidos…
En este punto, la compañía ha realizado también un trabajo de investigación para hacer música a través del movimiento del cuerpo, de sensores, de ondas: “Utilizamos una antena wifi y tenemos un guante inalámbrico con sensores con el cual el movimiento de la mano representa un sonido. Es un poco la fusión del movimiento del artista con el sonido”, una forma de saber “cuál es el sonido del artista. Hay una parte de investigación electrónica que nos ha interesado mucho”, apunta Girón.
Control de la música
También han trabajado con el “lector de una cámara que lee el cuerpo de una persona y, según cómo se mueve, controla una música reproducida desde un ordenador”, explica el artista. Añade además cómo le ha inspirado el simple contraste de una sepia, que “es totalmente vida y tiene unas células que producen electricidad. Puede producir luz y la mezcla de este animal, tan de agua, con la energía eléctrica nos ha inspirado mucho.” La conclusión de Girón es que “somos cien por cien materia orgánica pero nos podemos dejar afectar por este mundo eléctrico, informático.” Otro ejemplo que pone es el crepitar de los látigos que él mismo maneja y que “cada vez que suenan rompen la onda de sonido; esto te produce ciertas sensaciones.”
Éste es un espectáculo en el que además el colectivo se ha dejado sorprender, “explorando tanto variantes circenses de toda la vida que conocemos bien como aquellas que no conocemos.”
La creación ha sido totalmente colectiva, con Girón como un miembro más de todo ese marasmo de creatividad compartida, y con Alba Sarraute “dirigiendo y guiando el material” en su labor como directora artística.
Desde que el espectáculo se estrenara en 2015, se han incorporado algunos elementos nuevos y han habido un par de recambios de artistas. En general el espectáculo ha evolucionado ya que “los artistas van desarrollando el talento y algunas escenas han ido más lejos.” “Sifonòfor” es uno de los cuatro espectáculos creados por una compañía que ostenta una carrera meteórica desde que se estrenara en 2013 con “Indomador.” Desde entonces han presentado espectáculos como “Chicken Legz” (creado para entornos específicos y estrenado en Tàrrega), que recientemente les ha llevado a Japón; y “Sapiens Zoo”, una coproducción con el Mercat de les Flors. La mezcla de disciplinas (introducen incluso elementos de danza y claqué) y las menciones al mundo animal son una constante en sus producciones.
LA CITA
Espectáculo “Sifonòfor”
Lugar Centre Cultural
Hora Sábado 4 de febrero, a las nueve de la noche
Precio 10€
