Terrassa

La plantación tenía 1.177 matas de marihuana

Más mil plantas, alineadas, crecidas, con un sofisticado sistema de cuidado. La Policía Municipal informó ayer de las magnitudes del cultivo de marihuana descubierto y desmantelado en la calle de Catalunya, en Sant Pere, después de un incendio eléctrico, y de sus repercusiones penales: hubo un detenido, el inquilino de la nave.

El propietario, localizado por los agentes, aseguró a la policía que tenía arrendado el edificio a una persona para guardar material de obra. Pero allí había algo más, si es que alguna vez hubo material de obra.

La actuación policial se precipitó el domingo, a las 8.30 de la tarde, a raíz de un incendio en un cable eléctrico instalado en la fachada de un inmueble de la calle de Catalunya, junto a la esquina con la de Francesc Salvans.

Llegó una dotación policial y arribó otra de Bombers. Y operarios de una compañía de suministro eléctrico, que apuntaron la posibilidad de que la quema obedeciese a la manipulación de un contador.

Puerta cerrada
Existía peligro, según la policía, de que se declarase un incendio dentro de la nave. El propietario del local abrió la puerta y los agentes observaron un pasillo cerrado con otra puerta, metálica. Por allí se introducía el cableado. Mas la puerta estaba cerrada con llave y el dueño dijo que la llave se había perdido. Los bomberos la forzaron. Tras la puerta se abría otro pasillo con tres estancias.

En una había bidones, abono, cajas de cartón, nutrientes y productos químicos, y mascarillas. El hallazgo vegetal y masivo estaba cerca. En otros dos espacios, los policías encontraron sendas plantaciones de maría. Según señaló el cuerpo local, el cultivo estaba iluminado con focos y los aparatos de ventilación disponían de filtros de carbono "para disminuir el olor desprendido por las plantas".

Los vecinos vieron a agentes sacando material del edificio hasta bien entrada la madrugada del lunes. Los guardias decomisaron 1.177 matas de cannabis ya floridas; cortaron la maría y la trasladaron a la Jefatura junto con el resto de efectos confiscados. El inquilino de la nave fue detenido por un delito contra la salud pública (tráfico de drogas) y un delito de defraudación del fluido eléctrico.

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