Los servicios de urgencias registran desde hace dos semanas una punta de demanda que tensiona los equipos sanitarios y vuelve a provocar escenas de camillas en los pasillos. El Hospital de Terrassa y el Hospital Universitari Mutua Terrassa confirman el aumento de los cuadros de sintomatología respiratoria especialmente entre la población de mayor edad y con patologías crónicas.
Es la avanzadilla de la epidemia de la gripe, que no se espera hasta entrado el mes de enero. De momento, el Hospital de Terrassa ya ha declarado los primeros dos casos de gripe A, dos hombres que superan los 50 años y que, tal como marca el protocolo, permanecen aislados y hospitalizados. En Mútua también han detectado y declarado su primer caso de gripe, que suma un total de tres pacientes infectados del virus en la ciudad.
De momento la prevalencia de la gripe es leve y afecta a apenas 44 personas por cada 100 mil habitantes. La Generalitat declarará la epidemia cuando el virus afecte a 100 pacientes por cada 100 mil habitantes. Si se comporta como el pasado invierno, cuando la epidemia llegó con marcado retraso, la gripe podría extenderse masivamenter a finales de enero e incluso principios de febrero.
Los dispositivos
En las urgencias de Mútua hace 15 días que se han disparado los cuadros graves en pacientes de edad avanzada. "Los cambios de temperatura de los últimos días y la llegada del frío descompensn a las personas con enfermedades crónicas como insuficiencias cardíacas, problemas respiratorios o diabetes", explica la doctora Gemma Muñoz, responsable del servicio de urgencias de Mútua.
Desde hace dos semanas, su equipo atiende sobre todo "a pacientes de más de 85 años e incluso 95 años, la mayoría de los cuales requieren ingreso".
Las urgencias de Mútua atienden durante el año una media de 330 pacientes adultos y niños y pueden alcanzar e incluso superar los 500 en plena epidemia de gripe.
En este momento, el servicio visita ya a 370 enfermos cada día. "Es lo habitual en estas fechas -explica la doctora Muñoz-. Durante los últimos años la demanda hospitalaria ha aumentado de forma regular a lo largo de todo el año, algo que repercute también en los servicios de urgencias, especialmente en invierno".
Mútua ha activado estos días el PIUC (Pla Integral d’Urgències de Catalunya), un dispositivo de refuerzo que habilita hasta 32 camas en la planta 13 del hospital. "De manera complementaria también potenciamos la hospitalización domiciliaria", apunta la doctora Muñoz. La responsable de las urgencias de Mútua afirma que en los picos de urgencias "ha habido episodios de pacientes en los pasillos, pero la demanda está siendo aún muy irregular".
Efecto sierra
En el Hospital de Terrassa también han detectado el "efecto sierra" que las afecciones propias de las primeras semanas de invierno provocan en las urgencias hospitalarias y que el año pasado se alargaron "hasta el final de la epidemia de gripe", comenta Andrea Valdés, coordinadora de enfermería del área urgente del centro hospitalario.
Su equipo espera la llegada del pico de demanda "para Navidad o principios de año", aunque a dos semanas de las fiestas ya han detectado un incremento sustancial de pacientes. "Durante las dos últimas semanas se ha solapado un episodios de gastroenteritis con el aumento de las afecciones respiratorias, sobre todo en población de edad avanzada".
En el Hospital de Terrassa, como en Mútua, esta semana se han visto también los primeros cuadros pediátricos. Las afecciones bronco pulmonares han tardado algo más en afectar a la población infantil.
Pese al incremento de la demanda, el centro de la N-150 no registra un nivel importante de saturación. El equipamiento reserva 28 camas en la planta 5 para absorber las puntas de demanda del Parc Taulí . Además, el Hospital de Terrassa cuenta con 12 camas extra para las urgencias de corta estancia y 16 para el PIUC.
