Lo que fuera el ayuntamiento del Antic Poble de Sant Pere está en obras. Tenía filtraciones de agua y era perentorio renovar sus instalaciones. El Consistorio emprendió días atrás la reforma, que durarán unos cinco meses y han sido presupuestadas en 300.031,08 euros. La empresa adjudicataria es Baldó i Associats Constructora.
Los trabajos, que permitirán preparar la antigua sede consistorial para convertirse en albergue juvenil, incluyen la dotación de nuevos sistemas de prevención y control de la legionela y la ampliación de la instalación eléctrica; también, la adaptación del edificio "a la nueva normativa de renovación de aire para el cumplimiento de los requerimientos de ahorro energético", señala el Ayuntamiento de Terrassa. Los operarios cerrarán una parte del patio. Varias actuaciones han sido recomendadas por los bomberos atendiendo al futuro uso del inmueble como albergue.
El último paso
Meses atrás el gobierno municipal ya acordonó con vallas los aledaños del edificio, junto a la plaza de la Font del Comú, por problemas en la fachada. Ahora, las obras son de mayor calado y se suman a las efectuadas entre el 2006 y el 2010, cuando las escuelas taller de Foment de Terrassa llevaron a cabo trabajos ya proyectados en el programa de habilitación del albergue. Faltaba acometer el último paso de la adecuación a la normativa.
El gobierno local afirma que está trabajando para reubicar a las entidades que usan el edificio, ofreciendo "diferentes alternativas para que su actividad se vea lo menos afectada posible durante los meses que durarán las obras". El realojo progresivo se ha topado con escollos en el caso del Agrupament Escolta i Guia Torrent de Les Bruixes (ver despiece). El Consistorio asegura que busca "la mejor solución".