Un conato de incendio, una alerta por la humareda generada por unas brasas, dejó al descubierto una plantación de marihuana el lunes por la noche. El cultivo, descubierto por la Policía Municipal, estaba en un local ubicado en la calle del Camí de Castellar y registrado meses atrás por los Mossos d’Esquadra, que se incautaron en aquella operación de mil plantas de maría. El lunes, la policía decomisó 252 matas y detuvo a una persona.
Eran las 11.10 de la noche cuando los bomberos recibieron un aviso: alguien alertaba de un posible incendio en una planta baja en la calle del Camí de Castellar, en el tramo de Sant Pere Nord. Varias dotaciones de Bombers se desplazaron al inmueble al tiempo que unidades de la Policía Municipal, avisadas por el sistema 112.
El humo procedente de un local se estaba esparciendo y penetraba en la escalera de las plantas superiores del bloque de pisos. Dos ambulancias se presentaron también en el sector, a pocos metros de la esquina de Camí de Castellar con la calle de Pompeu Fabra.
Había que entrar en aquel local. Aunque las llamadas de vecinos se referían a la humareda que surgía de unos bajos de la calle de la Poetessa Caparà, los servicios de emergencias se introdujeron en el inmueble por una puerta que da a la calle del Camí de Castellar. Una vez dentro, comprobaron que el humo tenía su origen en las brasas de un fogón de carbón.
No había nadie allí, ni tampoco se observaron daños. Pero sí otra cosa. Los agentes inspeccionaron el local y en un departamento se toparon con el hallazgo: una plantación de marihuana, con sistemas de iluminación y ventilación; y con 252 plantas. En otra parte del lugar localizaron 101 gramos de cogollos, ya preparados para su distribución, según la policía.
Llega el presunto responsable
Pasó media hora y una persona se presentó en el edificio. Era, supuestamente, el responsable del local. Y el individuo acabó detenido por la Policía Municipal como presunto autor de un delito contra la salud pública, de tráfico de drogas.
Ocurrió algo similar hace poco menos de un año en la misma finca, según la información que ha trascendido. También fue un lunes, el del 11 de enero pasado, a media tarde, cuando agentes de los Mossos d’Esquadra culminaron una investigación con la entrada en el local, donde hallaron unas mil plantas de cannabis y detuvieron a un sujeto, que un par de días después salió en libertad.