El autismo infantil se detecta ahora cuando los pacientes tienen entre 3 y 7 años. Localizar los casos a los 18 meses de vida, para actuar cuanto antes, es el objetivo del proyecto de investigación del Hospital de Terrassa al que irán destinados los fondos recaudados con la venta de un calendario benéfico. La campaña es de altos vuelos, habida cuenta de la cantidad de personas y entidades implicadas: una decena de asociaciones e instituciones de Terrassa y su comarca.
La iniciativa la presentaron ayer el Ayuntamiento y las entidades involucradas en un acto celebrado en la Masia Freixa. La historia nació en el seno de la Escola Bressol El Tabalet, continuó con el impulso, al alimón, de la Escola Municipal d’Educació Especial El Pi y se extendió como una mancha de aceite hasta lograr una adhesión entusiasta con pocos parangones. "Buscamos el apoyo de entidades y nos llevamos una sorpresa muy agradable", dijo ayer Conxita Navarro, directora de El Tabalet. El centro educativo se puso en contacto con el Hospital de Terrassa, pues tenía claro que la iniciativa debía tener como destino "alguna investigación médica para niños", y la respuesta fue tan rápida como clara y alentadora.
El hospital del Consorci Sanitari de Terrassa cuenta con una línea de investigación sobre la detección precoz del autismo infantil, y a ese programa irá a parar el dinero que se recaude con la venta de calendarios. El autismo es una patología que preocupa a la sociedad, recalcó ayer Abel Martínez, jefe del servicio de pediatría del Hospital, y su incidencia va en aumento, pero el personal especializado dispone de herramientas para tratarla.
El diagnóstico precoz
"Y tendremos mejores herramientas para el diagnóstico precoz", adelantó el pediatra. Anna García, psicóloga clínica y una de las investigadoras adscritas al proyecto, recordó que la prevalencia del autismo es del 1 por ciento e incidió en la importancia de localizarlo cuanto antes, de lograr que entre las señales de alarma y el diagnóstico medie poco tiempo.
Las fotos del calendario están repletas de niños de corta edad. Con policías, con sanitarios, con bomberos, con Minyons. Las sesiones fotográficas fueron algo similar a concentrar "todas las salidas escolares en una semana", contó Mercè Fontané, responsable de "escoles-bressol" del Ayuntamiento.
De momento se imprimirán quinientos calendarios, pero se presume que las ediciones se ampliarán. El precio de cada unidad será de diez euros. Los interesados pueden adquirirlas en las entidades adheridas al proyecto y el próximo 18 de diciembre en una fiesta que tendrá lugar en la plaza del Progrés. Están detrás de la campaña el Ayuntamiento, la Policía Municipal, Bombers de Terrassa y de Viladecavalls, el Consorci Sanitari de Terrassa, la empresa de ambulancias FalkVL, las escuelas El Pi y El Tabalet, el Institut del Teatre y Minyons.