La Generalitat no tiene intención de destinar recursos para la construcción de la ansiada residencia y centro de día de Sant Pere Nord. Así lo afirmó la semana pasada, durante el pleno del Parlament, Dolors Bassa, consellera del Departament de Treball, Afers Socials i Famílies, tras una interpelación del PSC sobre el "colapso" que sufre la atención a gente mayor en residencias por la falta de plazas.
La consellera afirmó que "el Departament en este momento no destinará ni un euro al tocho" y que, por tanto, no hay ninguna partida prevista para la construcción de residencias en Catalunya. Bassa explicó que el modelo por el que apuesta Junts pel Sí es el de la concertación de plazas con empresas privadas, pero que esta línea de actuación, por la que estaba previsto crear 1.500 plazas no se ha podido llevar a cabo por la ausencia de presupuestos para este año. Esta misma semana, el Departament ha anunciado que subvencionará con dinero público 750 plazas en 149 centros privados.
La diputada de Junts pel Sí explicó durante el pleno que el modelo hacia el que camina el Govern es el de la integración de los distintos recursos de atención a gente mayor (centros de días, residencias y otros servicios sociosanitarios). En estos momentos, dijo, la conselleria está tratando de hacer un mapa con todos los recursos disponibles en Catalunya, ya sean plazas de residencia públicas como privadas, "para saber que se necesita en cada ciudad". Bassa dio la razón al diputado socialista Raúl Moreno, que denunció la falta de equipamientos para gente mayor, pero insistió en que el Govern está en pleno proceso de cambio para construir "un sistema propio de Servicios Sociales" y atribuyó parte de los déficits del actual modelo a los "incumplimientos" del Gobierno Central.
Las explicaciones de Bassa no han convencido al alcalde, Jordi Ballart, que lamenta la decisión del Govern y recuerda que "hoy en día Terrassa solo cuenta con una residencia pública", lo que es "claramente insuficiente" para una ciudad de 215 mil habitantes. El alcalde recuerda que, además de la residencia y centro de día de Sant Pere Nord, hay otras "demandas históricas", como un equipamiento para gente mayor en Ca n’Anglada o la apertura de todas las plantas de la residencia pública Mossèn Homs. "De aquí a diez años nos encontraremos con un problema social grave si en la actualidad no ponemos las bases asistenciales necesarias que garanticen a las personas mayores una vida digna", alerta el primer edil.
Reclamación unánime
Los planes del Department para Terrassa chocan con la reclamación unánime de todos los grupos respecto a la residencia de Sant Pere Nord. El pasado octubre, el Ayuntamiento en pleno aprobó por unanimidad una propuesta en la que reclamaba que en 2017 se destinen recursos para licitar y empezar a construir el ansiado equipamiento.
El diputado socialista Raúl Moreno, que llevó la propuesta al pleno del Parlament, señala que toda la comarca del Vallès Occidental, no sólo Terrassa, "tiene evidentes déficits en residencias para la Tercera Edad", unas carencias "que se intentan cubrir con servicios de gestión privada que suelen tener costes más elevados y no garantizan el acceso a todos ni dan respuesta a la necesidad real".