Con la vuelta al colegio comienzan las inquietudes de los padres sobre la educación de sus hijos y el temor al fracaso escolar. ¿Aprobará este año?, ¿se animará este curso? o ¿cómo podemos ayudarle para qué se motive? son algunas de las dudas que surgen en esta época del año. Sin embargo, los especialistas en salud visual hacen hincapié en la importancia que tienen los problemas oculares en esta preocupación social. Según el director de la unidad de Oftalmología Pediátrica y Estrabismos de la Clínica Baviera, doctor Carlos Laria Ochaita, "se estima que un 30% de los fracasos escolares pueden ser debidos a problemas de la visión, por lo que una detección precoz es clave para evitar esta situación".
En España, el 20% de los jóvenes entre 18 y 24 años ha abandonado prematuramente el sistema educativo sin haber terminado sus estudios de secundaria, según el último informe de la oficina estadística de la Unión Europea, Eurostat. De hecho, nuestro país es líder en fracaso escolar, duplicando la media comunitaria, que se sitúa en el 11%.
Ante esta situación, Clínica Baviera quiere demostrar la importancia que tiene la visión en este problema, pues puede afectar al carácter del niño provocando falta de interés en sus tareas escolares. "Los pequeños con déficit visual rechazan las actividades sociales bien la lectura o bien aquellas que tienen lugar al aire libre según sean sus limitaciones, si son más acentuadas en visión de lejos, cerca o ambas. Además, estos problemas pueden manifestarse en el carácter del niño fácilmente y por supuesto, en su rendimiento escolar" señala el doctor Laria Ochaita. Con el fin de ayudar a los padres, Clínica Baviera ofrece una serie de consejos para que la visión no dificulte el rendimiento escolar de sus hijos.
1. ¿Cuándo se aconseja acudir al oftalmólogo?
La primera revisión se recomienda efectuarla en el primer año de vida e incluso desde el mismo momento del nacimiento, en el caso que el pediatra lo considere oportuno o si ha habido cualquier factor de riesgo como antecedentes familiares o prematuridad. Después de esta primera visita, se aconseja volver al oftalmólogo de manera periódica.
2.¿Cómo se debería hacer la primera revisión oftalmológica?
Esta visita, que debe llevarse a cabo en los primeros meses de vida. Siempre se realiza dilatando la pupila del bebé para poder obtener un diagnóstico correcto de la existencia de múltiples patologías y de su estado refractivo, es decir, de la necesidad de utilizar gafas.
3. ¿Se puede detectar si un niño tiene problemas visuales?
Estas circunstancias solamente se podrán conocer si se llevan a cabo controles periódicos, que deben realizarse desde su nacimiento para descartar cualquier patología. No se debe esperar a los 4 años de edad, porque la prevención de los problemas visuales comienza desde los primeros meses de vida del pequeño.
4. ¿Qué señales nos pueden alertar de que nuestro hijo no ve correctamente?
Hay ciertas actitudes que son indicativos de problemas visuales como acercarse al papel, frotarse los ojos, enrojecimiento ocular, guiñar los ojos o posiciones de tortícolis, etc.
5. ¿Qué consecuencias podría conllevar una falta de corrección visual?
El desarrollo de un ojo vago o ambliopía. Este problema debe tratarse lo antes posible, pues en edades posteriores es muy difícil su recuperación y en ocasiones, hasta imposible.
Con estas pautas, los expertos en salud visual infantil quieren concienciar a los padres sobre la importancia de realizar controles periódicos para conocer el estado visual de nuestros hijos. La detección precoz de un problema en la vista se convierte en elemento clave para evitar el fracaso escolar.