Terrassa

La artista Anna Taratiel muestra su universo interior

La artista egarense Anna Taratiel es la gran protagonista de la primera de las exposiciones que se inaugura en el Centre Cultural Terrassa en este reinicio de temporada (hoy a las siete de la tarde.) Esta vez la iniciativa está organizada por el estudio Tigomigo, que apuesta por una artista egarense de prestigio internacional, considerada como una de las principales exponentes del “street-art”. Taratiel vive y trabaja en nuestra ciudad desde el año pasado, después de haber pasado varios años residiendo y trabajando en la capital holandesa.

“La abstracción del paisaje” es el título de la muestra que se podrá ver hasta el próximo 25 de septiembre en el Espai La Galeria. En este caso la artista apuesta por mostrar obras en las que predominan “los colores vibrantes, la abstracción y la geometría.”

Tal como se explica en el texto de presentación, se muestran una serie de “paisajes deconstruidos”, en los que la autora “externaliza su universo interior.” Con ello consigue que “las barreras entre el espacio público y el privado se diluyan, y sus paisajes imaginarios se conviertan en un juego de espejos.” Anna Taratiel (Terrassa, 1982) dio el salto de la calle a las ferias de arte, tras haber crecido artísticamente en Barcelona utilizando el pseudónimo de Ovni. Especialista en Arte Mural por la Llotja, en Amsterdam “combinó la creación artística haciendo murales e instalaciones en el espacio público con los encargos para grandes marcas”, se explica en su biografía.

Lenguaje abstracto
Con el paso del tiempo su producción ha ido desembocando en un conjunto de obras que “se caracterizan por un lenguaje profundamente abstracto y geométrico, donde la línea, el color y recientemente el volumen, intervienen de forma constructiva en su entorno vital”, se explica.

Entre sus referentes, se destacan las abstracciones de Franti?ek Kupka, las geometrías de Víctor Vasarely o las formas geométricas, lineales del constructivismo ruso.” Pero su inspiración, se advierte, “proviene de las pequeñas cosas de nuestra realidad cotidiana, como los mosaicos árabes, la arquitectura deconstructiva y las construcciones de madera para niños.”.

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