Ausiàs Dalmau, Sergi Pérez, Alexis Cosano y Martí Pinós son estudiantes del Grado en Diseño y Desarrollo de Videojuegos del Centre de la Imatge i Tecnologa Multimèdia (CITM), adscrito a la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). Junto a Guillem Muñoz (ahora ya desvinculado del equipo), desarrollaron un videojuego, NEC, que en abril ganó el Independev Game Fest, un certamen que pretende potenciar la creatividad en el sector del mobile gaming, dando visibilidad a los nuevos talentos y a sus proyectos. Ahora, se han constituido como un estudio de ideas y proyectos para poder crear videojuegos que aporten algo más que diversión y entretenimiento.
“La idea fue de Ausiàs. Mientras hacíamos un trabajo de Física, se le ocurrió la idea de hacer este videojuego. Nos lo comentó al resto del equipo, lo perfilamos todo bien y al final surgió NEC”, explica Cosano. Los estudiantes empezaron a desarrollar el juego, llamado NEC (por las iniciales de Not even close, una de las frases típicas de un youtuber al que siguen los alumnos) a principios de año, con la idea de presentarlo al concurso de videojuegos de la UPC Three Headed Monkey Awards, en el que quedaron finalistas. “Al principio íbamos un poco sobre la marcha. Buscábamos tutoriales en Internet, páginas de expertos en la materia…”, comenta el estudiante.
el independev game fest
Mientras estaban en ello vieron la posibilidad de presentarlo también al Independev Game Fest, un concurso que se celebraba por primera vez y que organizaban Unidad Editorial y Kerad Games, la compañía fundada por el futbolista del FC Barcelona Gerard Piqué. En un principio, las bases del concurso decían que un tercio de los derechos de autor del videojuego ganador sería para Unidad Editorial, otro tercio para Kerad Games y el resto para los creadores, cosa que no gustó a los estudiantes del CITM. Sin embargo, los organizadores del Independev Game Fest reconsideraron su postura, asegurando que la totalidad de los derechos de autor serían para los desarrolladores del videojuego y los alumnos de la UPC decidieron que presentarían el suyo al concurso. La fecha límite era a a mediados de abril, por lo que “empezamos a trabajar como locos para poder tener un juego presentable”, recuerda Cosano. “Empezamos a trabajar a saco, pasamos bastantes noches sin dormir”, señala Pérez. “El último mes, en el sprint final, si podíamos no ir a clase, aprovechábamos y nos quedábamos en casa, dormíamos muy poco”, añade.
Gracias a su esfuerzo, pudieron presentar el juego a tiempo y acabaron ganando el primer premio, consistente en 10 mil euros.
“Era algo que queríamos hacer extraescolarmente y nos presentamos para probar suerte. Una vez salieron los proyectos finalistas, vimos que teníamos alguna posibilidad. Fuimos a la gala de entrega de premios pensando que podíamos ganar”, cuenta Pérez.
el videojuego
NEC es un juego del género puzzle para dispositivos móviles que combina la agilidad de los dedos del jugador y sus reflejos. El juego consiste en introducir una pelota dentro de un portal, mientras se hace girar las figuras que el jugador se va encontrando. Cada nivel es diferente al anterior, con nuevos elementos que irán apareciendo a medida que la dificultad vaya en aumento.
“Creo que lo que nos hizo ganadores del Independev Game Fest es la posibilidad de llevar NEC a ser un juego de fútbol. Era de los más fáciles de cambiar un poco y tener un juego de fútbol. Creo que eso nos ayudó bastante a convencer el jurado”, afirma Pérez.
Los alumnos del CITM se han entrevistado con el equipo de Kerad Games, que los está ayudando con sus consejos a desarrollar y comercializar el videojuego. Ahora, los estudiantes están trabajando para que el juego que presentaron al concurso se convierta en un videojuego más enfocado al fútbol. “La base era muy minimalista, muy plana y muy en blanco y negro”, señala Pérez, por lo que ahora el equipo está trabajando, sobre todo, en la parte visual y artística, pero también en la programación.
Cuando el videojuego esté finalizado, la mecánica será similar al primer prototipo. El objetivo principal para el jugador será mover la figura para que la pelota vaya rebotando y acabe dentro de lo que antes era un portal y ahora será una portería. Aun así, se añadirán otras funciones y pruebas para el jugador, a modo de objetivos secundarios. La idea de los estudiantes es que dentro de un tiempo, el juego pueda descargarse para dispositivos iOs y Android.
“Tenemos pensado continuar haciendo videojuegos. Hay otro juego en proceso que estamos diseñando en paralelo”, apuntan estos estudiantes con un futuro prometedor.