“Jason Bourne”, de Paul Greengrass, supone el retorno de Matt Damon al personaje del título casi diez años después. Para esta nueva entrega los guionistas no se han inspirado en ninguna de las novelas de Robert Ludlum ni en las de Eric Van Lustbader sino que han inventado una historia original en la que la CIA, tras descubrir que Bourne sigue vivo y sospechar que está detrás de un devastador ataque informático, manda tras él a un peligroso asesino. Original, lo que se dice original, no es porque al pobre Jason le persiguen para matarle desde “El caso Bourne” en 2002 pero, para mantener el interés, la trama incorpora nuevos misterios y conspiraciones, así como ingredientes de la actualidad, sin olvidar las virtuosas secuencias de acción marca de la casa, ambientadas en esta ocasión en Atenas y Las Vegas. A señalar que el gobierno griego no permitió el rodaje en Atenas y las escenas en cuestión se filmaron realmente en Canarias (el resto de la película se rodó entre Estados Unidos, Alemania, Inglaterra, Islandia e Italia). Por lo demás, reencontramos a viejos conocidos como Julia Stiles, que está en la serie desde el primer día, pero también conoceremos a los personajes encarnados por Tommy Lee Jones, Alicia Vikander y Vincent Cassel, un trío que siempre apetece ver en pantalla. La curiosidad es que, a pesar de ser el protagonista, Matt Damon tiene poquísimo diálogo. La anécdota es que para la espectacular secuencia de Las Vegas se utilizaron 170 coches y se reabrió un hotel-casino que había cerrado sus puertas en mayo de 2015. La escena en cuestión tardó cinco semanas en filmarse porque las autoridades sólo les permitieron rodar en la calle unas pocas horas diarias y además únicamente de noche. Intérpretes: Matt Damon, Tommy Lee Jones, Alicia Vikander, Julia Stiles, Vincent Cassel, Riz Ahmed. (Cinesa).
“Malas madres”, de Jon Lucas y Scott Moore, es una divertida comedia sobre una mujer que está al borde del ataque de nervios a causa de sus esfuerzos por ser la madre perfecta. Cuando decide tomarse un respiro y salir de vez en cuando con sus amigas para desconectar, la acusan de “mala madre” y se lo toma muy mal. El film critica con un humor muy desenfadado la presión que la sociedad ejerce sobre las mujeres, así como las ideas preconcebidas sobre la maternidad. Tal vez el humor no sea demasiado sutil y desde luego abusa de las secuencias en las que el alcohol acaba siendo el único remedio para todos los males –los codirectores fueron los guionistas de “Resacón en Las Vegas”– pero los gags resultan siempre efectivos y las actrices tienen mucha química. Además de Mila Kunis, la protagonista, destaca la “robaescenas” Kathryn Hahn, que borda su “desmadrado” personaje. Lástima que al final se olviden de la sátira y, en los últimos minutos, la trama vire hacia el cuento de hadas edulcorado. La curiosidad del film es que durante los créditos finales aparecen las actrices con sus madres en la vida real. La anécdota es que las secuencias de la escuela se rodaron en el colegio más antiguo de Estados Unidos, que no está situado en Chicago, donde se supone que transcurre la acción, sino en Nueva Orleans.
Intérpretes: Mila Kunis, Kathryn Hahn, Kristen Bell, Christina Applegate, Jada Pinkett, Jay Hernández. (Cinesa).
“Pastel de pera con lavanda”, de Éric Besnard, es una increíble película romántica que ha tenido un éxito extraordinario en Alemania y no es de extrañar porque aunque es francesa parece una comedia alemana, es decir, no te ríes ni poniéndole toda la buena voluntad del mundo. Sus protagonistas son una joven viuda que está a punto de perder sus tierras por no poder pagar la hipoteca y un individuo que es superdotado pero que, por culpa de una enfermedad, se comporta como si fuera retrasado y maleducado. Él se enamora de ella porque le dice que sabe preparar pasteles de pera y ella se enamora de él porque lo dice el guion. Ningún espectador (o, por lo menos, ninguna espectadora) logrará entender jamás qué es lo que ve la protagonista en un bicho raro como éste. Si lo que se pretendía era concienciar al público sobre su terrible enfermedad, no les ha salido bien porque el tipo es más bien repelente. De todos modos, en defensa de la película debemos reconocer que está rodada con elegancia, que los actores realizan un buen trabajo y que, justo al final, hay un par de segundos en los que el personaje masculino cae simpático y todo, pero sólo son un par de segundos. La curiosidad es que Virginie Efira encadenó este rodaje con el de “Un hombre de altura”, otra comedia romántica sobre una pareja atípica, que, por cosas de la distribución, aquí se estrenó antes.
Intérpretes: Virginie Efira, Benjamin Lavernhe, Lucie Fagedet, Léo Lorléac’h, Hervé Pierre, Hiam Abbass. (Catalunya, VOSE y doblada).
“La mina”, de Miguel Ángel Jiménez Colmenar, es una película de terror española con voluntad internacional, o sea, rodada en inglés, si bien la filmación se ha efectuado en Asturias y Euskadi con actores anglosajones muy conocidos en su casa. El film destaca por la fotografía y el paisaje pero falla en su indefinición genérica ya que oscila entre el terror y el drama familiar sin decidirse por ninguno (ni llegar nunca a dar miedo). Además, el ritmo está descompensado. La trama gira en torno a un expresidiario que ahora trabaja como vigilante en una mina. Mientras intenta arreglar las cosas con su mujer, empiezan a ocurrir sucesos extraños que no se sabe si son reales o se trata de alucinaciones suyas.
Intérpretes: Matt Horan, Kimberley Tell, Jimmy Shaw. (Cinesa).
“Zipi y Zape y la isla del capitán”, de Oskar Santos, es una cinta infantil de aventuras inspirada (muy vagamente) en los personajes de tebeo creados por Escobar en 1948, si bien los guionistas también han saqueado sin piedad ni disimulo toda clase de clásicos de la literatura infantil, desde “20.000 leguas de viaje submarino” hasta “Peter Pan”. En esta ocasión los traviesos gemelos protagonistas se disponen a pasar las vacaciones de Navidad con sus padres en un barco y llegan a una isla en la que viven personas peculiares y suceden cosas misteriosas. Lo mejor del film son algunos personajes secundarios, aunque no todos estén bien desarrollados, así como su condición de producto muy espectacular en lo que se refiere a decorados y efectos especiales. Lo peor, que se han olvidado de la faceta gamberra que tenían los personajes en el cómic. Por lo demás, el director es el mismo de “Zipi y Zape y el club de la canica”, estrenada hace tres años, pero el reparto se ha renovado por completo. La anécdota es que una parte del rodaje se realizó en Hungría.
Intérpretes: Teo Planell, Toni Gómez, Elena Anaya, Carolina Lapausa, Jorge Bosch, Goizalde Nuñez, Fermí Reixach. (Cinesa).