El Ayuntamiento acaba de otorgar las ayudas anuales para entidades y organizaciones no gubernamentales (ONG) terrassenses que desarrollan proyectos de cooperación al desarrollo. En la convocatoria de este año, se han destinado 400 mil euros entre 22 iniciativas solidarias. Otras cuatro entidades han quedado fuera del reparto.
El Consistorio egarense destina desde hace años el 1% de los ingresos directos previstos en el presupuesto a "extender el valor de la solidaridad de los ciudadanos de Terrassa mediante la cooperación solidaria y la contribución al desarrollo de los países empobrecidos". Este porcentaje, que a pesar de la crisis y los recortes se ha mantenido estable, equivale este 2016 a 400 mil euros.
Como suele ser habitual, la decisión sobre qué proyectos subvencionar no la toma el concejal de turno, ni siquiera los distintos grupos por consenso, sino que corresponde a la comisión permanente del Consejo Municipal de Solidaridad, uno de los órganos consultivos mejor valorados y respetados dentro de la corporación local por su buen funcionamiento. Los concejales en pleno no hacen más que ratificar la decisión del consejo municipal, que, obviamente, se rige por una bases reguladores a la hora de otorgar las ayudas. Durante todo el proceso, son los miembros de la comisión permanente (formada por los grupos municipales, las ONG que gestionan proyectos en países en desarrollo y expertos en cooperación internacional) los que analizan, estudian y evalúan los proyectos presentados en cada convocatoria. Son ellos los que, según los baremos acordados, valoran la calidad de las iniciativas.
La resolución del Consejo Municipal de Solidaridad fue elevada a pleno a finales de junio, donde todos los concejales votaron afirmativamente. Todos menos Anna Rius, de Terrassa en Comú, que se abstuvo ya que forma parte de una de las entidades que recibirá subvención municipal.
África y América del Sur
Los proyectos que han conseguido la ayuda del Consistorio, que son tanto de grandes ONG como de pequeñas entidades, abarcan aspectos que van desde la formación, a la promoción de la salud, la construcción de escuelas o el acondicionamiento de pozos, entre otros muchos. Se desarrollan, principalmente, en países de África y América del Sur y las subvenciones otorgadas van desde los 5 mil hasta los 20 mil euros. En la mayoría de los casos, la ayuda municipal coincide con el importe solicitado, aunque hay algunas entidades que habían reclamado más recursos de los finalmente concedidos, lo que puede obligar a reajustar ligeramente el importe del proyecto.
