La Obra Social de la PAH, representantes del equipo de gobierno y una delegación del BBVA se reunieron el jueves para abordar los problemas de las familias que residen de forma ilegal desde hace años en pisos de la entidad financiera y tratar de encontrar una solución para ellos, como sería el alquiler social.
El encuentro, que se produjo a petición de la PAH después de una reciente protesta a las puertas del Ayuntamiento, fue "decepcionante" para la entidad. Yesika Caro, una de las asistentes por parte de la Plataforma, asegura que "la reunión se centró en el convenio de cesión de pisos del BBVA a la Generalitat, es decir, en algo que no era para lo que habíamos ido". Pero no hubo soluciones, afirma, para las personas que viven como "ocupas" en pisos del banco.
Caro comenta que el BBVA sólo se comprometió a facilitar un alquiler social a sus clientes, no a quienes estén "ocupando" un inmueble de su propiedad sin haber tenido la hipoteca con ellos. Sobre estos casos, que ascienden a unos 70 entre los que coordina la PAH y los que sigue Servicios Sociales, "nos dijeron que van a paralizar los desahucios, que aunque les llegue la notificación judicial, no van a ejecutar el lanzamiento". Para la PAH, esto es insuficiente: "Si no les van a echar, ¿por qué no les hacen un alquiler social?".
La concejal de Vivienda, Lluïsa Melgares pidió que si no va a haber desahucio, no se señale el lanzamiento porque "no se puede tener a las familias constantemente angustiadas". La PAH y el Ayuntamiento reclamaron que este parón en los desahucios se prolongue un año, pero según dicen, el BBVA estudiará si puede ser seis meses.
Según un portavoz del banco, la entidad es "sensible" a las demandas de Terrassa y también lo es "con las familias en riesgo de vulnerabilidad". La entidad bancaria admite que en la reunión se aprovechó para explicar la cesión de 1.800 pisos a la Generalitat porque "puede ayudar" a muchas familias terrassenses. Fuentes de BBVA consideran que es una "buena noticia" que Terrassa sea una de las ciudades en la que primero se entregarán algunos de estos pisos (ver recuadro) y que el convenio "es un gran acuerdo". El banco insiste en que "no hay ninguna familia en riesgo de exclusión a la que se la eche de casa".
La PAH discrepa de esta afirmación. Asegura que "no es verdad que todo cliente de BBVA se quede en casa en alquiler social". Caro explica que la Plataforma ha atendido recientemente dos casos en los que "ha habido presiones para que renunciaran al alquiler social si querían conseguir la dación en pago". Ante este dilema, "la gente prefiere quedarse sin deuda que vivir de alquiler social, pero con una quita aún por pagar".
La PAH considera que la entidad financiera expone "una realidad que no es la que viven las familias en el día a día". En un comunicado emitido a raíz del convenio con el Govern, denuncia que ese acuerdo es "un intento de lavado de imagen" de una entidad "que es la segunda que más desahucios ha ejecutado, después de Bankia".
La concejal de Vivienda se quejó de la falta de detalles sobre el convenio: "No sabemos qué pisos son ni para quienes serán. Queremos que sea el Ayuntamiento el que asigne los pisos a las familias vulnerables que tenemos inscritas en el registro de solicitantes de vivienda", exigió Melgares. La edil expresó su "decepción" porque el Govern no les ha informado del contenido del convenio, a pesar de haberlo solicitado hasta en cinco ocasiones.
La PAH, BBVA y el bipartito acordaron volver a reunirse el próximo mes de septiembre para hacer seguimiento de los casos y de los compromisos adoptados.
