El grupo municipal de ERC-MES denunció ayer que tras un año de mandato han podido constatar que "el gobierno formado por PSC y CiU incumple de forma reiterada los acuerdos plenarios". Así lo asegura Carles Caballero, que puso sobre la mesa once de estos incumplimientos, aunque "hay muchos más", para señalar que "es gravísimo que el gobierno haga caso omiso a las demandas del pleno".
Para el republicano, en la base de estos incumplimientos están "los 37 años de ordeno y mando" del PSC. Ahora gobiernan en minoría y "están descolocados, no entienden que aunque no les guste, no tienen más opción que cumplir con lo que ha votado la mayoría", critica Caballero, que recuerda que el valor del pleno no está en los 27 concejales electos, sino en que estos representan la voluntad de los ciudadanos. "El gobierno no cumple con lo que en determinados momentos ordena y manda la mayoría de los terrassenses", reitera.
El edil republicano relató un episodio especialmente grave, dijo, por la "baja calidad democrática" que demuestra tener el bipartito. Explicó que en una reciente comisión de Cultura, el teniente de alcalde Amadeu Aguado "llegó a decir que los dictámenes del gobierno tienen más valor que los de la oposición, aunque hayan sido aprobados por mayoría". La afirmación, denunció Caballero, "es de traca".
La formación exige el "respeto escrupuloso a las decisiones plenarias", se hayan alcanzado con las mayorías que se hayan alcanzado, "como no puede ser de otra forma". Caballero explicó que los acuerdos incumplidos no se limitan a los presentados por una determinada fuerza política y que muchos de ellos salieron adelante con el voto favorable del propio equipo de gobierno.
Insta a dar explicaciones
El edil explicó que el Ejecutivo local ha desarrollado tres formas de desatender las demandas del pleno: "no hacer lo que el pleno manda que se haga, cumplir sólo la parte de la moción que les gusta y dilatar tanto el cumplimiento de los acuerdos que cuando lo hacen, la propuesta ha perdido el sentido". La situación, insistió, es "gravísima". Esquerra exige al bipartito municipal que dé explicaciones y se pregunta: "¿De qué sirven las mayorías democráticas en el Ayuntamiento de Terrassa’".
Algunas de las mociones no ejecutadas son la que proponía abrir las bibliotecas por la noche en época de exámenes, la de diseñar el nuevo modelo de seguridad de forma participativa, la de trabajar con banca ética o la de estudiar la creación de una entidad financiera local, entre otras.