Los terrassenses Sense Sal estrenaron el viernes por la noche el programa previsto sobre el escenario del Parc del Catalans. Y lo hicieron derrochando energía en una vibrante actuación que abrió y cerró "Tinc un nou pla", uno de sus temas más conocidos, incluido en el trabajo "Algún lloc al món".
La actuación de los jóvenes egarenses (el cantante y guitarrista del grupo, Ignasi Cabanes, cumplía justo 23 años el viernes) continuó con canciones como "Crida amb mi" y "Brilla Salvatge" (dos de las últimas grabaciones de los de Terrassa). Alícia Rey y el propio Ignasi Cabanes son las voces principales de Sense Sal, y además tocan la guitarra. Todo con el apoyo del resto de miembros de la banda, que con frecuencia acompañaron la festiva música con coreografías que animaban aún más al público.
Participativo
Una de las canciones en que más respuesta hubo por parte de los espectadores (la mayoría, jóvenes) fue "Senyor Morse". Los asistentes siguieron el "punt, ratlla, ratlla, ratlla, punt" del estribillo abriendo y cerrando los brazos. Por entonces, el fin de fiesta empezaba ya a acercarse. Antes, los de Sense Sal habían interpretado "Huracà", "Surt del teu cap" o "Tot torna a començar". Buena parte de los espectadores repasaban las letras en voz alta. Y la noche seguía avanzando.
Antes de acabar el concierto, Sense Sal versionó, catalanizando, la canción "Dragostea din tei", que el grupo rumano O-Zone convirtió en un himno gay hace más de una década. También hubo momentos más reposados, como cuando la banda interpretó "Berlín", que sonó como un vals bajo el cielo (el viernes, sin estrellas) del Parc dels Catalans, mientras el público bailaba en parejas al compás.
Tras tocar de nuevo "Tinc un nou pla", ya para cerrar, el concejal de Cultura, Jordi Flores -presente en el concierto- exclamaba: "Boníssims! Són boníssims!". A tenor de las caras bajo el escenario, era un pensamiento compartido.