Tiene 71 años, escribe canciones desde hace más de cuarenta y, sin embargo, jamás había actuado en Terrassa. La larga espera dio sus frutos; miles de personas llenaron la Plaça Nova, y buena parte de ellas aguardaron durante horas la llegada de un artista que no les defraudó. José Luis Perales no se limitó a interpretar los temas incluidos en su último disco, titulado "Calma", sino que tuvo a bien no dejarse en el tintero prácticamente ninguna de sus canciones míticas: "Y cómo es él?", "Me llamas", "Te quiero" o "Un velero llamado Libertad" (estas dos últimas, ya en los bises.)
El músico repasó su trayectoria recordando además que sus canciones han sido interpretadas por artistas de fama mundial, tales como Jeanette (que convirtió en un clásico inolvidable "Por qué te vas?", probablemente su canción más recordada) o Julio Iglesias (que adaptó con su personal estilo el tema "América".)
La internacionalidad del artista se puso especialmente de manifiesto dada la gran representación de aficionados de la comunidad latina egarense en un concierto que arrancó con puntualidad y que se desarrolló a lo largo de una hora y media.
La voz de José Luis Perales, a pesar del implacable paso del tiempo, se mantiene intacta, y la obligación de rememorar piezas que ya lleva unos cuantos años interpretando no parece ser un hándicap: una banda completa, con una instrumentación variada, y unos arreglos renovados, le insuflan nueva vida a composiciones que han formado parte de la banda sonora de la infancia y juventud de muchas de las personas reunidas en la Plaça Nova.
"Y me marché contigo", la pieza que abre su más reciente disco, dio el pistoletazo de salida a una actuación en la que pronto comenzaron a caer sus canciones de toda la vida, piezas como "Me duele la distancia de ti", "El amor", "Y tú te vas", "Amada mía", "La llamaban loca"… Entre tanto, manifestó su cariño por el público, opinó que el escenario de su actuación estaba situado en un "lugar de belleza incomparable", y también habló de "Calma", un último disco en el que se refiere al "mundo convulso" en el que a su juicio vivimos ahora, en el que "nos hace falta más diálogo, más generosidad, más calma."
Momentos de soledad
El cantautor también compartió con su audiencia otros momentos íntimos, aquellos instantes de "gran soledad" en los viajes, las escapadas al campo en busca de una esquiva musa, o cómo a veces le llaman "guapo", aunque aclaró: "La palabra más hermosa que me han dicho nunca es "abuelo." Eso le sirvió para presentar uno de sus últimos temas, "Guillermo", dedicado a su nieto.
Parece haber pasado el tiempo rápido, a Perales le debe resultar difícil poder transmitir toda la intensidad de una vida consagrada a la música…. pero eso no importa cuando su público esperó casi un rato de intimidad con él. Pese al baño de multitudes, muchos han llegado a considerar sus canciones casi como propias, por el alto nivel de identificación de las mismas con las más variopintas vivencias y los más entrañables recuerdos.
Hacia al final de su actuación dominó el tono acústico en un par de temas, con acordeón y cajones flamencos, ofreciendo otro punto de vista de un concierto completo, y para muchos, inolvidable.