La herramienta legal que ha de definir por qué cauces los ciudadanos son una parte activa de la vida pública y política de la ciudad encara la recta final hacia su visto bueno definitivo. Y es que tras la aprobación inicial en el pleno de mayo, ya ha finalizado el periodo en que dicho código, también conocido como reglamento de participación ciudadana, podía recibir alegaciones. El límite temporal terminó el 31 de mayo, y al final han sido cinco las entidades de la ciudad que han presentado enmiendas (en total, cerca de sesenta) al documento. Es decir, han hecho las aportaciones que consideran necesarias para modificar el texto y mejorarlo.
Las entidades que han presentado alegaciones son dos asociaciones de vecinos (Poble Nou-Zona Esportiva y Segle XX), además de la Federació d’Associacions de Veïns de Terrassa (FAVT), el Consell d’Entitats d’Acció Ciutadana y Salut Mental Terrassa.
Dichas entidades se reunirán el próximo lunes por la tarde en el Ayuntamiento con los grupos políticos municipales para que expliquen -en palabras de la regidora de Ciudadanía y Calidad Democrática, Meritxell Lluís- "qué motivaciones les han llevado a presentar las alegaciones al reglamento", que ha sido el fruto de un largo proceso de elaboración. Una vez que se haya celebrado el encuentro del lunes, la comisión política de calidad democrática -integrada por los grupos del pleno municipal- se reunirá el viernes de la próxima semana para decidir qué alegaciones se aceptan, y cuáles no.
A título individual
En el trasfondo de las enmiendas expuestas, una de las cuestiones que más se repite es qué vías encuentra el texto para hacer que los canales de participación de los ciudadanos a título individual no debilite la participación de las entidades. Es decir, de la sociedad organizada. En esta línea (aunque no solo) se orientan por ejemplo las enmiendas de la FAVT. Las aportaciones relativas a los consejos municipales de distrito son otro denominador común en las alegaciones de las entidades.
La edil de Ciudadanía y Calidad Democrática, Meritxell Lluís, prevé que el articulado con sus alegaciones pueda elevarse al pleno de julio para su aprobación definitiva. El nuevo reglamento de participación ciudadana sustituirá al que está vigente desde 1995.
Una fecha clave
Julio. La regidora Meritxell Lluís prevé que el texto pueda aprobarse en ese mes de un modo definitivo.
