Las personas que están infectadas por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) -también conocido como “virus del sida”- sufren más fallos de memoria, de capacidad para concentrarse o al planificar su día a día. “Hasta un cuarenta por ciento de los pacientes con VIH explican en la consulta que tienen olvidos frecuentes o que les cuesta mantener la atención en el trabajo”, dice la doctora Montserrat Sanmartí. En los últimos tres años, la experta ha indagado sobre los motivos por los que un número reseñable de seropositivos presentan dichas alteraciones de memoria.
El trabajo de campo ha sido reconocido por Mútua Terrassa en la primera edición del Premi Resident Investigador, un galardón que la entidad sanitaria acaba de librar. Mútua también ha premiado el trabajo “La influencia genética en cáncer de mama triple negativo”, del doctor Carlos Cabrera, quien ha explorado en las mutaciones genéticas que pueden derivar en este subtipo de tumor de mama, el triple negativo, que hasta ahora resulta más difícil de tratar que otros.
Resultados
Mútua ha querido con este certamen promover la investigación entre sus médicos residentes, es decir, entre los doctores que han elegido el hospital egarense para formarse en una especialización. Al premio se presentaron veinte trabajos, de los que se seleccionaron la mitad para su exposición pública. Y, en última instancia, se eligieron las investigaciones ganadoras.
En el caso del trabajo de campo sobre el cáncer de mama triple negativo, el doctor Carlos Cabrera indica que tras un año y medio de estudios ha obtenido resultados positivos. “Lo que hicimos fue comparar a un conjunto de pacientes con este cáncer de mama y a un grupo de mujeres sanas. La idea era evaluar qué papel podían jugar un grupo de mutaciones en 16 genes en el riesgo de contraer la enfermedad. Al final hemos visto que estas mutaciones se hallaban en el 46 por ciento de las mujeres enfermas. Y, por contra, no estaban presentes en las sanas”, dice. El análisis también ha determinado que una de esas mutaciones sirve para pronosticar si las pacientes enfermas vivirán más o menos años.
En cuanto a la investigación sobre el VIH, la doctora Montserrat Sanmartí comenta que “hemos hecho tests específicos a las personas infectadas por el virus para saber cuál era su nivel cognitivo y hemos visto que la mitad lo tienen alterado, si bien en un grado leve, algo que les permite hacer su vida normal”. La especialista añade que aún hace falta concretar los motivos por los que existe tal alteración en personas con VIH.
LA CIFRA
41. Es el número de médicos residentes que han empezado su periodo formativo en Mútua Terrassa.