El número de donantes de órganos creció un 20,4 por ciento en Catalunya entre enero y abril de este año frente al mismo periodo de 2015. Ese 20,4 por ciento comprende tanto las donaciones de personas vivas como de cadáveres. Son los datos que esta mañana ha facilitado el director de la Organización Catalana de Trasplantes, Jaume Tort, en una rueda de prensa celebrada en Barcelona con motivo del Día del Donante, que se conmemora hoy, 1 de junio.
Las donaciones de cadáver son las que más han aumentado en Catalunya, al hacer hasta en un cuarenta por ciento, pasando de 82 donaciones entre enero y abril de 2015 a 115 donaciones en dicho periodo de 2016.
El perfil de donante en Catalunya durante 2015 fue el de una persona que, de media, tenía 59 años. El 56 por ciento falleció por un accidente cerebrovascular y el cinco por ciento debido a un traumatismo craneoencefálico por culpa de un accidente de tráfico.
En la otra cara de la moneda están los receptores, es decir, los pacientes que esperan recibir un órgano para llevar a así una vida normalizada y superar una situación de enfermedad. En este caso, un total de 1.266 catalanes aguardan hoy por recibir un órgano. De ellos, 1.011 esperan un riñón; 166, un hígado; 36, un corazón; 48, un pulmón; cuatro, un páncreas y uno de los pacientes guarda su turno por un intestino.
En el conjunto de España, los números también son positivos, ya que la cifra de donaciones ha crecido un once por ciento durante el presente 2016 frente a las cifras de 2015, según la Organización Nacional de Trasplantes. En la actualidad hay en España 42 donantes por cada millón de habitantes. El trasplante de pulmón es que el ha experimentado un mayor incremento, del treinta por ciento, seguido del de riñón (seis por ciento) y el de corazón. En cuanto a los donantes de médula, la ONT espera que continúe la tendencia al alza y se rebasen las cifras de cien donantes al día del año pasado.
