Los agentes de los Mossos d’Esquadra que desplegaron el martes un espectacular operativo en la calle de Galileu eran del Àrea Bàsica Policial (ABP) de Rubí e investigaban a un grupo implicado presuntamente en robos con fuerza. La intervención, que se desarrolló a mediodía, fue presenciada por decenas de vecinos y transeúntes. Algunos de ellos vieron a un policía encañonar con un arma a un hombre.
Hubo tres detenidos en el operativo policial. Los indicios conocidos apuntan a que la operación se ejecutó en Terrassa por motivos circunstanciales. Se infiere que los agentes seguían a los sospechosos y algo desencadenó que se precipitasen los acontecimientos.
A eso de las 12.30 del mediodía, unos testigos vieron a gente correr y oyeron gritos de "¡policía!" y "¡al suelo!", y cómo un agente de paisano sacaba un arma que esgrimió ante uno de los sospechosos.
Primero, los policías hicieron tumbarse a uno de los perseguidos en la acera, a pocos metros de la calle de Volta. Luego a otro; al tercero lo sacaron de un coche y lo trasladaron junto a los otros dos mientras le agachaban la cabeza. Unos vecinos grabaron la secuencia.