El cine Catalunya se llenó el miércoles para el estreno en Terrassa del documental "Joana Biarnés, una entre tots". Tras la proyección, la fotógrafa participó en un coloquio con los asistentes.
"Joana Biarnés, una entre tots" es un documental interesante por muchos motivos: el histórico-sociológico porque es el retrato de una época, los años 60 y 70; el feminista porque Biarnés fue una pionera del fotoperiodismo que tuvo que luchar contra los prejuicios machistas; el estético por la calidad de sus fotografías y el mundano por las anécdotas que se cuentan sobre personajes famosos (desternillante la historia de Polanski).
No obstante, por encima de todo, es un film muy divertido y vitalista, gracias al enorme sentido del humor con el que la protagonista -y otros entrevistados, como su marido- narra las mil y una vicisitudes que marcaron su carrera, desde los problemas para ejercer su profesión hasta sus encuentros con los diferentes personajes famosos a los que fotografió.
También contiene algunos instantes emotivos, como cuando Joana recuerda a su padre o cuando rememora el reportaje de las inundaciones de 1962, el más escalofriante que tuvo que realizar.
Contada de forma cronológica, desde su infancia hasta la actualidad, y con un ritmo muy dinámico, la película utiliza como hilo conductor las fotos de Joana Biarnés, que ilustran y/o complementan lo que ella y los demás entrevistados van explicando. La selección de instantáneas es magnífica y demuestra no sólo el talento de la protagonista sino también su ductilidad ya que Biarnés hizo reportajes deportivos, de moda, de actualidad y de sucesos, foto-fija para el cine y retratos de toda clase de personas.
Por otra parte, el ajustado metraje es todo un ejemplo de concisión. Incluye lo importante y evita momentos y elementos superfluos.
En la película intervienen la propia Biarnés, su marido, que también es periodista, su hermana, personajes famosos como Arzak, Raphael -de quien fue fotógrafa personal- o Serrat y compañeros de profesión como Colita, César Lucas, Gervasio Sánchez, Cristóbal Castro y Sandra Balsells, entre otros.
Finalizada la proyección, Joana Biarnés declaró que le habría gustado que su padre "hubiera podido ver este momento" y dió las gracias al fotoperiodista Cristóbal Castro por haberla "redescubierto".
Debate
Posteriormente, pasó a debatir con los asistentes en un animado coloquio en el que contó, entre otras cosas, los motivos por los que dejó la fotografía en los años 80 y los preparativos para su próxima exposición antológica. También explicó que de todas las personas retratadas a lo largo de su vida el que que más le impresionó y le permitió lucirse como fotógrafa "fue Salvador Dalí". Biarnés aseguró que "la fotografía seguirá existiendo pero en el futuro no será lo mismo porque con el digital todo va demasiado rápido y las fotos tienen que hacerse con el corazón".
La fotógrafa se despidió con humor declarando que "la foto de mi vida es la que haré mañana".