Un niño de 7 años resultó herido el jueves, con un profundo corte en una mano, al caerle encima una puerta de vidrio en una hamburguesería del sector Montserrat. El cristal reventó solo. El menor fue trasladado al Hospital de Terrassa; le aplicaron media docena de puntos de sutura.
El incidente tuvo lugar en el Burger King situado a unos metros del Eroski. El niño había acudido al local con su padre. Poco después de las nueve de la noche, ambos se preparaban para salir del restaurante. El pequeño había estado jugando en una sala habilitada para ello. Se puso las zapatillas. Al parecer, la cristalera estalló de súbito cuando el menor se apoyó en ella para levantarse. El crío quedó hecho un ovillo bajo los vidrios trizados. De una mano le manaba sangre cuando su padre lo atendió.
El menor chillaba, embargado por el espanto. Llegaron ambulancias y mossos d’esquadra. El niño fue trasladado al Hospital de Terrassa. Salió a las tres de la madrugada. Burger King dijo ayer a este diario que revisa puntualmente sus instalaciones y que usa vidrio templado para evitar lesiones graves en caso de rotura. La empresa, que ayer contactó con la familia del niño, investiga las causas del accidente y asegura seguir de forma exhaustiva este caso "para que no se vuelva a producir".
