“Batman v. Superman: el amanecer de la justicia”, de Zack Snyder, es una superproducción de efectos especiales que supone el encuentro de los dos superhéroes más famosos del mundo. El director dice haberse inspirado en la miniserie de cómic “El regreso del señor de la noche”. Lo mejor del film son los espectaculares decorados y bellísimos escenarios –gran trabajo de Patrick Tatopoulos–, el sonido, la música, la fotografía, los cuerpazos de Henry Cavill y Gal Gadot y la energía arrolladora de Jesse Eisenberg. Lo peor, las dos horas y media de duración, un guion pedante y absurdo del que desconectas a los diez minutos, unos diálogos pretenciosos y una absoluta falta de humor y sentido lúdico. Sólo te ríes (un momentito de nada) en el breve diálogo entre Diane Lane y Ben Affleck. Por lo demás, lo más sorprendente es que de los ciento cincuenta y tres minutos que dura la película, Gal Gadot se pase ciento cincuenta y dos de “mujer florero” y sólo uno de Mujer Maravilla (aunque a lo mejor lo pidió ella misma cuando vio el horrible traje de superheroína que le iban a poner). Lo más inesperado es ver aparecer a un actor famoso que no sale en los créditos ni en la publicidad, tan arrugado que resulta casi irreconocible. También le han puesto arrugas de más a Ben Affleck porque en esta versión se supone que su personaje es un cincuentón y a nadie se le ocurrió que podían contratar a un actor que tuviera cincuenta y tantos años de verdad. En cambio, su mayordomo Alfred ha rejuvenecido una década y media, que es lo que separa a Jeremy Irons de sir Michael Caine. Y vale que Irons es uno de los mejores actores vivos del mundo pero el papel de Alfred era “de” Michael Caine y no lo tendrían que haber cambiado.
Intérpretes: Ben Affleck, Henry Cavill, Amy Adams, Jesse Eisenberg, Gal Gadot, Laurence Fishburne, Jeremy Irons, Holly Hunter, Diane Lane. (Cinesa, en 3D).
“O los tres o ninguno”, “opera prima” del humorista francés Kheiron, premiada en el festival de Tokio, es una comedia dramática basada en la historia real de los padres del director, exiliados iraníes perseguidos tanto por el Sha como por Jomeini. Además de dirigir y escribir el guion, Kheiron interpreta al protagonista, es decir, a su padre cuando era joven. El film está dividido en dos partes, una que se desarrolla en Irán en los años 70 –y que se tuvo que rodar en Marruecos– y otra en Francia en los 80 y 90. En la primera descubrimos la lucha política del personaje central y su paso por la cárcel y en la segunda su huida a Europa con su mujer y su hijo de un año, así como sus esfuerzos por rehacer su vida partiendo de cero. La particularidad es que, a pesar de lo dura que es la historia, está tratada en clave de humor tierno, haciendo hincapié en los aspectos más optimistas y eludiendo la demagogia y el panfleto. En Francia la han comparado con “La vida es bella” y ha tenido un éxito de taquilla extraordinario pero también unas críticas dispares que han elogiado a los actores, en especial a los secundarios, pero lamentado la impericia del director detrás de las cámaras y la supuesta frivolización de un tema tan serio (y, ahora mismo, candente) como el drama de los refugiados, si bien sus defensores arguyen que con humor siempre es más fácil hacer llegar el mensaje a los espectadores.
Intérpretes: Kheiron, Leila Bekhti, Gérard Darmon, Zabou Breitman, Rayan Rabia, Michel Vuillermoz, Carole Franck, Khereddine Ennasri, Naël Rabia. (Catalunya).
“Resucitado”, de Kevin Reynolds, es un “thriller bíblico” protagonizado por un soldado romano que investiga la desaparición del cadáver de Jesucristo y poco a poco se va convirtiendo. Viene a ser un cruce entre “Ben-Hur”, “La historia más grande jamás contada” y una película de detectives, con toques de “300” –por las batallas–, cuyo desarrollo es bastante previsible. El conflicto es mínimo y el ritmo, muy irregular, pero la fotografía y la banda sonora –del español Roque Baños– resultan meritorias. En el aspecto interpretativo, Joseph Fiennes realiza un buen trabajo y Cliff Curtis está perfecto como Jesucristo (aunque sea maorí) mientras que Peter Firth resulta demasiado teatral. En papeles secundarios aparecen actores catalanes y españoles, como el terrassense Jan Cornet –que va en camino de convertirse en el actor con más películas religiosas en su filmografía de toda la historia del cine–, Luis Callejo, María Botto o Àlex Maruny. La curiosidad es que se rodó en Malta y Almería. La anécdota, que Joseph Fiennes tomó clases para aprender a luchar como un gladiador.
Intérpretes: Joseph Fiennes, Tom Felton, Peter Firth, Cliff Curtis, María Botto. (Cinesa).
“Mi gran boda griega 2”, de Kirk Jones, es una secuela tardía de una comedia de éxito de 2002 que también inspiró una serie de televisión. Al igual que la primera parte, cuenta con un guion escrito por la propia actriz principal. En esta ocasión, la pareja protagonista descubre que debe volver a casarse porque su matrimonio no es legal a causa de un error burocrático. Al mismo tiempo, deben lidiar con la rebeldía de su hija adolescente. La distribuidora no ha permitido que los periodistas la viéramos antes del estreno pero los críticos americanos que asistieron a la “première” en Nueva York la semana pasada han colgado en internet perlas como que es “tan tonta que necesitas ver treinta horas seguidas de “Mad Men” como antídoto” o “si los griegos sobrevivieron a los persas, los turcos, los dioses y los monstruos, también sobrevivirán a esta película”. Otros han señalado que ofrece “más de lo mismo”, repitiendo los gags de la primera parte, que es previsible, superficial, poco sutil, edulcorada y pasada de moda, aunque la interpretación de Nia Vardalos sí ha sido elogiada. También se ha valorado que la trama contenga leves toques feministas. Intérpretes: Nia Vardalos, John Corbett, Elena Kampouris, Joey Fatone, Lainie Kazan, Gia Carides. (Cinesa).
“Quédate conmigo” (“Still mine”), de Michael McGowan, se repone el martes en sesiones de tarde y noche dentro del ciclo El cinema i la mort, organizado por Funerària de Terrassa. La película gira en torno a un hombre que quiere construir una vivienda accesible para su esposa enferma de Alzheimer y en su día obtuvo numerosos premios en Canadá, su país de origen. La entrada tendrá el precio simbólico de un euro y la recaudación será para la entidad solidaria El Rebost.
Intérpretes: James Cromwell, Geneviève Bujold, Campbell Scott, Julie Stewart, Rick Roberts. (Catalunya, sólo martes 29).