El campus de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) en Terrassa celebró ayer la puesta de largo de la nueva Escola Superior d’ Enginyeries Industrial, Aeroespacial i Audiovisuals (Eseiaat), resultado de la fusión de las históricas escuelas de ingeniería técnica y superior. El acto, en el vestíbulo del edificio modernista del Palau d’ Indústries de Lluís Muncunill -embrión de la formación de ingenieros para la industria- reunió en la presidencia al secretari de Universitats i Recerca de la Generalitat, Arcadi Navarro, al alcalde de Terrasa, Jordi Ballart y al rector de la UPC, Enric Fossas, así como al director de la escuela, Miguel Mudarra y al delegado del campus, Xavier Cañavate.
Todas las autoridades académicas y políticas aplaudieron la nueva etapa en los discursos pronunciados ante varios centenares de personas, la mayoría de la comunidad universitaria, que llenaron el recinto hasta la tradicional escalinata de acceso al primer piso de la Escola Industrial. En la clausura un pequeño concierto de jazz-símbolo distintivo cultural de la ciudad- a cargo del grupo Gemma Plans Quartet, y un aperitivo informal para intercambiar impresiones y felicitaciones. Durante el acto, el rector de la Politècnica, Enric Fossas, manifestó que hoy (ayer para el lector) es un día muy importante porque "significa la culminación de un largo proceso de trabajo que se remonta a una década atrás". El rector subrayó el potencial del campus UPC Terrassa. "Es uno de los cuatro clústers en ingeniería de esta universidad. Los otros tres están en Barcelona (Campus Nord y Campus Sud) y en el Besós pero nosotros queremos seguir implicados en el territorio. De ahí nuestra apuesta por mantener los campus de menor dimensión como los de Manresa, Sant Cugat y Vilanova i la Geltrú y Castelledefels".
Sumar y no restar
Fossas indicó que la unión de escuelas, necesaria con los nuevos tiempos, "no se debe a motivos económicos sino al contrario es para ofrecer un mejor servicios a los estudiantes, a las empresas, a la industria y al territorio". El rector elogió la labor del campus y aseguró que la nueva escuela -una de las más grandes del campus de la UPC y de Catalunya- ganará "en potencia, prestigio e internacionalización. Será un punto de referencia en Terrassa, Europa y en todo el mundo" .
El secretario de Universitats i Recerca, Arcadi Navarro, constató con datos el trabajo de la Politécnica para remarcar también su "internacionalitzación, innovación y emprenduría" . En su opinión, "la nueva escuela Eseiaat consolida una oferta de calidad en el territorio sin renunciar a ser un modelo internacional en el ámbito industrial, aeroespacial y audiovisual". Navarro también incidió en el papel del nuevo centro superior como motor para fomentar vocaciones tecnológicas y subrayó que "nuestra sociedad necesita ingenieros que tengan vocación de cambiar el mundo". Asimismo, el alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, consideró que "la suma de las dos escuelas en una sola es un beneficio" y se mostró esperanzando en que "la apuesta de la UPC en los ámbitos de la ciencia, la ingeniería y la tecnología incentivará la creación de puestos de trabajo de calidad". Ballart reiteró que "la educación es una pieza clave y que la universidad ocupa los primeros puestos de la agenda del Ayuntamiento de Terrassa. Para el alcalde, "el distrito universitario de la ciudad, liderado por la Politècnica por su historia y dimensión, debe configurarse como una red potente de centros conectados con la ciudad y con las empresas del territorio".
En esta presentación en sociedad también intervinieron el director de la Eseiaat, Miguel Mudarra (provisional hasta las elecciones que se celebrarán a final de año), y el delegado del campus, Xavier Cañavate, los "hombres" visibles del rector en este proceso complejo. Mudarra y Cañavate compartieron su satisfacción para la nueva etapa de las escuelas de ingenierías al tiempo que hicieron un reconocimiento al capital humano a quien le concedieron la "excelencia".