El grupo municipal de la CUP pedirá al Ayuntamiento que tome medidas urbanísticas para evitar la apertura de centros comerciales. El partido ha expresado esta intención tras conocer el proyecto de un nuevo centro comercial junto al supermercado Eroski , en Montserrat, promovido por la promotora Citygrove. La nueva zona contempla destinar 46 mil metros cuadrados a este uso y entre las firmas que ya han cerrado acuerdos se hallan Mercadona y Bricomart.
La CUP lamenta el anuncio de esta apertura y alerta que perjudica al comercio local. "La proliferación de centros comerciales irá en detrenimiento del comercio local de Terrassa. Precisamente del comercio de barrio de la ciudad que es el que intenta dinamizar los barrios desde siempre". Para la CUP, "la entrada de estos supermrecados, a golge de talonario y permitiendo acumular pérdidas durante los primeras años no multiplica la actividad comercial sino que la transforma a peor". En el mismo sentido manifiesta que la implantación de grandes superficies comerciales "empeora las condiciones laborales de los trabajadores" y critica que "los beneficios no revierten a la ciudad". Asimismo arremete también contra el modelo de funcionamiento. "Los productos llegan en avión desde muy lejos en lugar de apostar por un modelo de proximidad.