En Terrassa proliferan las plantaciones de marihuana a lo grande, a tenor de las operaciones policiales que en los últimos meses han desmantelado unas cuantas. Ayer, agentes de la Policía Municipal descubrieron una de grandes proporciones. Estaba en una nave industrial alquilada en la calle del Vendrell, en Les Arenes-La Grípia-Can Montllor, y la componían más de dos mil plantas de maría, según la información que ha trascendido. El operativo, que duró más de cinco horas, concluyó con la detención de un individuo.
Hacía meses que la nave, alquilada, estaba en el punto de mira de una investigación. Algunos vecinos se habían quejado de oleadas de olor a marihuana, un aroma intenso que se atribuía a un club cannábico cercano pero en realidad, al parecer, procedía del edificio industrial registrado ayer. Y ayer la Policía Municipal intervino.
Varios agentes se apostaron en los aledaños de la nave, situada en la calle del Vendrell, en la desembocadura de la del Fluvià, poco antes de las diez de la mañana. Durante la vigilancia vieron salir a un individuo al que pararon e identificaron. Tenían que llevar a cabo una inspección del inmueble dadas las sospechas, y para eso no necesitaban autorización judicial.
María y material
Policías uniformados y de paisano participaron en el dispositivo. En efecto, como sospechaban, allí había una plantación de cannabis que ocupaba más de la mitad de la superficie de la nave. Llegaron más agentes mientras el vecindario seguía con atención el desarrollo de la operación, de las entradas y salidas de los guardias, del trasiego, al final, de numerosos fardos con maría dentro y del material utilizado para el cultivo interior.
La envergadura pormenorizada de la requisa se desconoce, pero algunas fuentes apuntaron ayer que la policía se incautó de más de dos mil plantas de marihuana de diversos tamaños. El individuo al que los agentes habían sorprendido a la salida del inmueble fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública, relativo al tráfico de drogas, y como tal fue conducido a la Jefatura policial de la avenida de Les Glòries Catalanes.
Poco antes de las tres de la tarde dos vehículos del cuerpo local, una pick-up y una furgoneta, transportaron el material confiscado que quedaba en el recinto. A las 3.15, los agentes que aún permanecían en la calle del Vendrell se marcharon para elaborar las diligencias.