La sindica de Greuges de Terrassa, Isabel Marquès, ha comunicado este fin de semana al equipo de gobierno su decisión irrevocable de no continuar en el cargo, pero ha aceptado la propuesta de prorrogar un tiempo más la responsabilidad y seguir en funciones “hasta que se elija nuevo síndico”. La defensora del ciudadano, sin embargo, ha puesto límite a la nueva prórroga, que se alargará “no más de tres meses -explicaba ayer Marquès-. Extinguido ese plazo presentaré mi escrito de renuncia”.
La Síndica suma 6 años al frente de la institución. Su mandato se extinguió hace un año, fecha en que la letrada aceptó la propuesta municipal de prorrogar su permanencia en el cargo durante doce meses más, hasta enero de 2016.
La continuidad de Marquès debía permitir a la “ombudswoman” decidir si abandonaba definitivamente la responsabilidad, algo que ha reiterado en los últimos meses, y al gobierno municipal ganar tiempo en la búsqueda de un relevo.
No ha sido así. Extinguido el plazo, la Sindicatura no dispone de sustituto y Marquès ha aceptado prolongar tres meses más su labor, aunque deja claro que finalizado el plazo “me iré definitivamente. No volveré a ser sindica”, decía ayer de manera tajante.
La letrada Marquès ha reiterado en los últimos meses su voluntad de no perpetuarse en el cargo y sugerido la oportunidad de que “entre savia nueva”. Además, la sindica tiene “nuevos proyectos” y ganas de volcarse en ellos cuanto antes, además de regresar a su despacho profesional.
Nuevo reglamento
La sindica de Greuges de Terrassa dejará en cargo como mucho en abril y con él varios retos sobre la mesa del gobierno municipal. Isabel Marquès lleva meses proponiendo la reforma del reglamento de la Sindicatura y una remuneración que dignifique el cargo, al que la letrada ha dedicado todo su tiempo durante 6 años, con un nivel de implicación personal sin precedentes y otorgando una gran relevancia social a la institución.
En este momento, la Síndica tiene una asignación de 500 euros brutos mensuales en concepto de “asistencias”.
Isabel Marquès compareció ayer en junta de portavoces para presentar la última memoria de la institución y comunicar su intención de retirarse. El equipo de gobierno se volcará ahora en la reforma del reglamento y en consensuar el nombre del nuevo síndico o síndica.
