El portavoz del grupo municipal de ERC-MES, Isaac Albert, criticó ayer “la falta de meditación” que, a su entender, mueve al alcalde Ballart al redefinir el modelo policial de Terrassa. El republicano aseguró “que se han roto espacios de encuentro” ante la propuesta que el primer edil hizo la semana pasada acerca de que los agentes locales puedan llevar cámaras en sus uniformes. Esta idea, según aseguró Albert en una rueda de prensa celebrada en el Ayuntamiento, “no aparecía en el Plan Director de la Policía Local en el que estábamos trabajando”.
Albert relacionó las nuevas medidas planteadas por el alcalde con la querella que quince policías municipales han interpuesto “por injurias y calumnias” contra la concejal de la CUP, Maria Sirvent. “A partir de estos últimos acontecimientos ha aparecido la improvisación”, consideró.
En su intervención, el republicano estuvo acompañado por el también concejal de ERC-MES, Carles Caballero, que respaldó las palabras de Albert. “Las propuestas de Ballart son ocurrencias que no se habían puesto sobre la mesa en la que trabajábamos con el equipo de gobierno en materia de seguridad”, afirmó. “Antes de plantear tales medidas conviene hacer una diagnosis interna y externa. ¿La policía municipal necesita cámaras? ¿En base a qué diagnóstico? ¿Con qué código deontológico y partida presupuestaria?”, se cuestionó.
Consenso
Desde las filas republicanas defienden que 20 de los 27 concejales del pleno y cuatro grupos políticos (el propio PSC, Terrassa en Comú, la CUP, además de ERC-MES) son favorables a disolver el llamado Grupo de Intervención de la Policía Local y a rehacer el marco que rige el funcionamiento del cuerpo. “Sería sencillo ponerse a trabajar en esta línea”, dijo Albert, que además propone que el nuevo Plan Director de la Policía se incluya en un marco de seguridad “más ampliado, consensuado y que emane también del Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana.”
Sobre la querella que 15 agentes del cuerpo han presentado contra la concejal Maria Sirvent (CUP) -las partes se reunirán hoy viernes en un acto de conciliación en los Juzgados de Terrassa-, Albert opinó “que ha evidenciado la falta de liderazgo del alcalde, que no ha defendido la libertad de expresión de un cargo electo ni tampoco a sus trabajadores, como jefe de la policía que es”.
El equipo de gobierno está en proceso de presentar a los diversos grupos municipales el nuevo Plan Director, que también contempla ampliar, en 50 efectivos, la plantilla de la policía en diez años.
