Quemaron presuntamente un contenedor en el barrio de Ègara, y fueron identificados como sospechosos de perpetrar ese incendio, pero el testigo que había alertado a la policía no los reconoció. Y ellos volvieron por sus fueros un par de horas después, el lunes de madrugada, y esta vez sí, esta vez fueron sorprendidos en plena acción incendiaria con otro contenedor de basuras. Son menores, dos de ellos de 14 años. El tercero tiene 17.
A la una de la madrugada los bomberos fueron informados de un incendio en un contenedor de basuras situado en la calle de Almería, junto al número 114.
Una dotación de Bombers de la Generalitat se desplazó a ese sector de Ègara, y una unidad de la Policía Municipal también lo hizo. Al parecer, un testigo habló con los agentes sobre la autoría de los incendiarios, pero no reconoció a los tres chicos a los que los guardias habían localizado e identificado cerca del lugar de los hechos.
Se marcharon de allí policías locales y bomberos, pero los primeros regresaron a Ègara un par de horas después de haberse ido. La historia se repitió.
Un intento
A eso de las 3.30 de la madrugada, el cuerpo policial supo de otra quema cometida por los mismos chicos. En esa ocasión, sin embargo, la cosa no pasó de tentativa. Avisó también el mismo testigo a la Policía Municipal. Los autores, al parecer, manipulaban un recipiente de recogida de basuras en el que introducían un líquido, se supone que para acelerar el desencadenamiento del fuego.
Y los guardias que acudieron a la zona entonces dieron con los sospechosos, pero esta segunda vez los tres chicos sí fueron reconocidos, y trasladados a la Jefatura por su presunta autoría en un delito de daños. Uno tiene 17 años y los otros dos cuentan 14. Luego pasaron a disposición de sus padres o tutores legales, y su caso, a la Fiscalía de Menores.
