Dos averías eléctricas de origen fortuito, una el viernes y otra el sábado, provocaron apagones en Terrassa. Casi siete mil abonados se vieron afectados en la suma entre un fallo y otro.
El primer apagón se inició a las 6.15 de la tarde del viernes y generó problemas de tráfico, pues paró el funcionamiento de grupos de semáforos en varios sectores. Según la Policía Municipal, el corte de suministro fue detectado en un principio en la avenida de Les Glòries Catalanes, la carretera de Montcada, la avenida de Barcelona y otras vías próximas.
Debido a la interrupción en los semáforos, cuatro unidades policiales regularon la circulación hasta que el fluido eléctrico se restableció poco a poco. El apagón afectó a 3.379 abonados de Endesa, según señalaron ayer fuentes de esa compañía. El suministro volvió de manera progresiva. A los diez minutos del corte la cifra de perjudicados bajó a 951, y en una hora y 45 minutos el resto de usuarios recuperó el fluido eléctrico en hogares y locales.
Desconexión
La causa de ese primer apagón fue fortuita, una desconexión en una línea de media tensión. El mismo origen casual tuvo el corte de luz que se produjo el sábado, a las once de la mañana, con una cifra inicial de afectados de 3.445.
El número se rebajó en un tercio a los siete minutos, según Endesa, y luego la reducción fue escalonada; hasta que, una hora y diez minutos después del inicio del corte, los equipos de operarios de la compañía consiguieron restablecer el suministro a todos los afectados.