Velaban a un familiar difunto. Salieron unos minutos del tanatorio, y allí, a las puertas del edificio de la Funerària, se armó la trifulca entre ellos, entre dos hombres. Hubo incluso patadas en los genitales, según testigos. Uno de los implicados en la refriega sacó una navaja y apuñaló al otro en el abdomen. Y fue detenido poco después, el viernes por la noche, por agentes de la Policía Municipal.
Eran las nueve de la noche cuando el cuerpo policial supo del altercado. Alguien llamó a la Jefatura desde la funeraria terrassense para alertar de que un hombre había sido apuñalado allí, en los aledaños del tanatorio.
Estaba tendido en el suelo. Dos sujetos que se encontraban en el tanatorio habían salido y, afuera, se desató una reyerta entre ambos, no ha trascendido por qué. Uno de ellos parecía en estado de ebriedad.
La policía activó el servicio de emergencias médicas, y envió al cementerio, a la Nacional 150, a varios agentes. Unas personas rodeaban al herido cuando llegaron los guardias, que hablaron con testigos y localizaron al otro implicado, al presunto autor del apuñalamiento, que permanecía en la zona.
Una navaja
Se presentaron dos ambulancias y el personal sanitario atendió en situ a la víctima, que presentaba una herida en el abdomen. No parecía grave, según se infiere de las primeras informaciones. El agredido fue trasladado al Hospital de Terrassa y su esposa, afectada de una crisis de ansiedad, fue asistida por el equipo médico que había arribado en una de las ambulancias.
Y el presunto agresor terminó detenido. Es de nacionalidad española, como la víctima, y ambos son vecinos de Terrassa.
El arma blanca, al parecer una navaja multiusos, fue recogida e intervenida por los agentes.