La candidatura de En Comú Podem escogió ayer la Societat Coral Els Amics, emblema del obrerismo y la cultura del siglo XIX, para celebrar su cierre de campaña en Catalunya. Y lo hizo rodeada de numerosos seguidores y de algunas de las figuras más relevantes de la plataforma política, como el ex fiscal anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, Joan Herrera y Ernest Urtasun, de ICV, el secretario general de EUiA, Joan Josep Nuet, o el economista Sergi Cutilla, miembro de la comisión para la auditoría de la deuda griega.
Sobre el escenario, el cabeza de lista por Barcelona, Xavier Domènech, despedía ayer en Terrassa "una campaña extraordinaria", en la que la lista de confluencia se mostró convencida de que mañana logrará un resultado electoral sin precedentes en Cataunya.
Después de agradecer a su equipo de campaña el trabajo realizado, y a Terrassa en Comú la organización de un cierre de campaña masivo y festivo, Domènech hizo un discurso eminentemente social con guiño al celuloide. "El más humilde tiene los mismos derechos que quien pretenda ser el más grande en este país", dijo para, en pleno estreno de la séptima entrega de Star Wars, citar al Maestro Yoda -"no me juzgues por mi tamaño"- y a Lucke Skywalker -"no lo intentes, hazlo".
En un estadio más mitinero, el cabeza de lista de En Comú Podem dijo despedir una campaña "en la que el miedo ha cambiado de bando". Y como ejemplo citó el anuncio de C,s de que puede abstenerse para que el ganador del 20D sea investido. "Están aterrados. Los grandes intereses del país les han llamado para que acudan en ayuda del PP".
Gran pantalla
En Comú Podem cortó ayer el tráfico de la calle Pantà para instalar una gran pantalla donde proyectó las imágenes del cierre de campaña en la Societat Coral Els Amics. En el interior, el mitin arrancó tras un breve y comprometido recital del grupo De la Carmela.
El acto reservó las primeras filas a los miembros del grupo municipal de TeC y a los primeros diez candidatos barceloneses de En Comú Podem, que uno por uno subieron al escenario. El primero en intervenir fue el director de Barna Sants, Pere Camps, que cargó contra los recortes y el IVA cultural.
Junto a él, la activista Lucía Martín (4) reconoció, no sin cierto rubor cómplice, haber puesto firme a un dirigente de Gas Natural por los cortes de suministro en el Hotel Palace, a la vez que se sentía seducida por el discurso de un directivo de Telefónica. "Me cayó bien y todo", admitió la candidata número 4, que prometió "una labor titánica" en el Congreso y pidió a la sociedad civil que "continúe apretando en la calle, porque el cambio no sólo se hace desde las instituciones".