Cuando Anna Riera decidió iniciar una campaña en Change.org para denunciar la presencia de unos maniquíes muy delgados en la tienda Lefties de Terrassa, no esperaba conseguir más de cien mil firmas en tan pocos días y aún menos, lograr su retirada. "No esperaba tantas firmas pero todo el mundo conoce a alguien que puede verse afectado por este tipo de maniquíes y tomarlos como modelo cuando no debería ser así, por lo que pueden haber conectado con mi iniciativa", explica la joven, que tras fijarse en numerosas ocasiones en la delgadez de muchas figuras, decidió actuar. Hace un tiempo, no lo habría hecho "porque a veces -dice Riera- pensaba que a lo mejor era normal pero ahora sé que no puede ser un modelo a seguir". Tras la substitución de los maniquíes, la joven matadeperense se muestra satisfecha con lo que ha conseguido aunque piensa que es insuficiente y que deberían cambiarse muchas otras figuras.
