Era su primer día como miembro de la asociación, y es difícil que lo olvide. El socio novel se quedó encerrado el jueves por la noche en el club cannábico al que acababa de afiliarse, situado en la calle de Vinyals, en Segle XX, y tuvo que intervenir la policía.
Eran las 10.20 de la noche. La alarma se había disparado, y el 112 informó a la Policía Municipal de que una persona estaba encerrada en un local. Un agente habló con el interesado. Estaba en una sala de la nave y los responsables de la asociación no se habían dado cuenta de su presencia antes de marcharse. Tras varias gestiones, la policía logró contactar con un responsable del club, y éste dijo que se dirigía en breve al local. Un agente comunicó la nueva por teléfono al encerrado, que en aquel momento hablaba con unos mossos a través de la puerta de la nave. La policía autonómica se hizo cargo del servicio.