Los ciudadanos se preguntan si hay tantos habitantes que justifiquen la presencia de tantos supermercados en Terrassa. Las grandes empresas de distribución afirman que sí y aducen las 412 mil personas que residen en la ciudad (215.706) y en su área de influencia (196.663). Un argumento al que suman el hecho de que sea la cuarta ciudad de Catalunya. Las últimas aperturas desde el verano han sido el hipermercado Esclat, situado en la avenida de Josep Tarradellas, y Aldi, en la carretera de Matadepera. En breve habrá un Caprabo de 250 m²en la Plaça Nova y un Bon Preu en la calle del Portal Nou de 1.580 m².
Terrassa representa una clientela efectiva y potencial para Mercadona, Caprabo, Dia, Aldi, Supeco, Consum, Lidl, Condis, Simply Market, Supercor, Eroski, Esclat (Bon Preu) y Carrefour, a los que se suman los históricos de Terrassa como Casa Evaristo, Supermercats Talló y Maximer. Nadie quiere perder la oportunidad de estar y ser visible en un momento con indicios claros de recuperación económica.
Son grandes superficies de alimentación con más de 800 metros cuadrados, con 42 puntos de venta diseminados estratégidamente por la trama urbana. En algunos sorprende su cercanía. Es lo que sucede en la carretera de Matadepera, donde Mercadona, Aldi y Maximer están separados por tan solo unos metros de distancia.
Todos ellos suman una superficie comercial global de 154.224 metros cuadrados. Una cifra que responde al cómputo municipal realizado en octubre en base a la parcela que ocupan y que difieren de las cifras que barajan todas y cada una de las empresas consultadas porque éstas calculan, estrictamente, la superficie de venta. Por barrios, los que tienen más metros cuadrados son: Torrent d’en Pere Parres (24.137); Can Parellada (23.281), el sector de Montserrat (10.000) y Ca n’Anglada (9.662). En la parte baja de la lista se sitúan La Cogullada (924) y los grupos de Montserrat (903).
Mercadona, a la cabeza
Por cadenas, la que lidera el ránquing es Mercadona, con once puntos de venta de más de 800 m². Le siguen Caprabo (cuatro, más el que abrirán en breve en la Plaça Nova), Carrefour (4), Dia (3), Aldi (3), Supeco (3), Consum (2), Simply Market (2), Lidl (2) y Esclat (uno más el Bon Preu que inaugurarán en 2016 en la calle del Portal Nou). Supercor Exprés y Eroski sólo tienen uno, respectivamente, y se encuentran en Sant Pere y en el sector de Montserrat.
En esta radiografía se evidencia que los barrios más habitados Centre (18.742), Ca n’Aurell (17.999), Sant Pere Nord (15.346) y Les Arenes, La Grípia Can Montllor (14.179) no son los que tienen más supermercados. En el Centre los consumidores pueden ir a Casa Evaristo y Carrefour; en Ca n’Aurell, a tres Mercadona; en Sant Pere Nord, a Aldi, Maximer y Simply Market, y en Les Arenes, La Grípia y Can Montllor, a los dos Mercadona que hay. Si a todos ellos les sumamos los supermercados con menos de 800 metros cuadrados la relación sería mucho más extensa.
Reacciones críticas
Por todo ello, la CUP presentó una moción para exigir una moratoria en la implantación de grandes superficies que superen los 800 m² porque consideran que afecta al comercio tradicional, que esta semana ha sido rechazada por el gobierno municipal, con los votos de PP y C,s. ERC-Mes se abstuvo y TeC votó a favor de la moción.
Mientras tanto, los ejes comerciales están a la expectativa. No están conformes con la nueva realidad, pero reconocen que es lícita porque se ajusta a la ley de la oferta y la demanda.
Dos opiniones discrepantes ante la postura del gobierno municipal, defendida por el teniente de alcalde de cultura, innovación y proyección de la ciudad y concejal de comercio y Turismo, Amadeu Aguado. “El Ayuntamiento no puede impedir la no instalación de un comercio porque nos regimos por la legislación de la Generalitat, las leyes supraestatales y también las europeas. ¿Si son pocos o demasiados supermercados? En todo caso lo tiene que decir el sector. Creo que, como empresas, han valorado que Terrassa sea una ciudad atractiva y con un potencial y una cartera de clientes”.
El edil reconoce que es un tema “sensible” entre la opinión pública porque son supermercados que han generado “centenares de puestos de trabajo”. Con todo, considera que Terrassa no es una “ciudad comercialmente perfecta porque aún tienen carencias”.
¿Qué beneficios conlleva para las arcas municipales la existencia de tantos supermercados? Es evidente que a más empresas, más impuestos anuales.
En este caso, deben afrontar el pago de la legalización de la actividad, el IBI (si son propietarios del local), el IAE (si facturan más de un millón de euros al año) y la tasa de residuos (si generan menos de un metro cúbico al día, que no es lo frecuente). En este último punto, es habitual que paguen a un gestor privado para que realice la recogida de residuos.
El primero, en 1978
El hipermercado Carrefour de Can Parellada ocupa el edificio que en 1978 se conoció como Híper, más tarde Pryca; posteriormente, Carrefour, la empresa que surgió de la fusión entre Pryca y Continente, y desde 2011 bautizado como Carrefour Planet. Durante una década fue el amo y señor de los grandes supermercados en Terrasa, exceptuando los históricos locales, como Talló y Casa Evaristo, este último, casi centenario. Maximer, también local, se implantó en 1983.
Fue en estos años cuando comenzó el goteo de aperturas: Dia (1989), Lidl (1996), Caprabo (1997), Mercadona (1998), Eroski (2001), Aldio (2002), Supercor (2014) y Esclat (2015).