En el libro de la exposición, Ana Fernández traza una completa biografía, artística pero también personal, de Àngela Ubasart, que no deja de ser a la vez un recorrido por el ambiente artístico de la ciudad (con abundantes y deliciosas fotografías de su álbum personal). A los 13 años, Àngela Ubasart manifestó a su familia su voluntad de dedicarse al arte. A partir de ahí Fernández explica sus profesores; su evolución; sus primeras exposiciones en la dificil Terrassa de principios de la década de los sesenta, la boda en 1964 (a los 22 años, "en el momento más permeable de su etapa formativa"), con su maestro, el escultor Fernando Bach-Esteve en 1964; su exposición en Nueva York; su práctica y reivindicación de la cerámica como un arte con una entidad propia; su labor pedagógica; la creación del Espai d’Art Bach-Esteve, y todo sobre una producción artística "inspirada y intensa".