La CUP ha decidido presentar una moción al pleno del mes de noviembre que suponga una moratoria para la apertura de nuevas grandes superficies comerciales en Terrassa. El partido asegura estar muy preocupado por las consecuencias que las aperturas de nuevos grandes supermercados en la ciudad puede tener en el comercio local. La moción pide que no existan concentraciones de más de ochocientos metros cuadrados de sector terciario en las nuevas zonas de expansión del casco urbano y la limitación de nuevas en el suelo ya consolidado, solicitando que se impida la concentración de suelo y locales para estos usos que superen los ochocientos metros de superficie.
Asimismo propondrá que se elimine la bonificación sobre el impuesto de actividades económicas que se aplica a grandes superficies comerciales y la creación de un impuesto específico para las que ya existen actualmente porque considera que los beneficiarios económicos de las grandes superficies comerciales tratan de externalizar los costes de su actividad en el medio ambiente, la ordenación del territorio y las infraestructuras de la ciudad.
En su comunicado la CUP destaca que las nuevas implantaciones comerciales son recibidas como positivas por el Ayuntamiento y el “stablishment económico” porque generan puestos de trabajo y crean riqueza, pero “es evidente que los puestos de trabajo que crean, los destruyen por otro lado porque los ciudadanos de Terrassa no pasarán a comprar más, si no a cambiar sus hábitos de consumo, o lo que es lo mismo dejará de comprar en las tiendas de su barrio”. Asimismo considera negativo que la creación de riqueza que puedan producir revierta sobre propietarios que “no están en Terrassa, y que en la mayoría de los casos ni tan sólo provienen de los Països Catalans”